Como lo hiciera Medellín (Colombia) con la Comuna 13 –un barrio que fue semillero de sicarios para el narcotraficante Pablo Escobar– la alcaldía Álvaro Obregón apuesta por el rescate de un polígono de 18 colonias de alta y media marginación ubicadas en la zona de barrancas a través de un programa que incluye escaleras eléctricas y mejoramiento de servicios públicos.
A este enjambre de colonias se le nombró Colectivo 18 y está ubicado a 15 minutos en automóvil del Centro Comercial Santa Fe, una de las zonas más exclusivas al poniente de la capital. El polígono –en el que habitan 30 mil personas– circunda la Presa Mixcoac y el Río Azoyapan, que más que áreas verdes se han convertido en basureros a cielo abierto.
Al estar en barrancas, es una zona de difícil acceso para el patrullaje, por lo cual tiene altos índices delictivos. Hay personas que por años no han salido de sus casas ya que su edad o condición física les impide subir y bajar las escaleras que comunican las calles de estas colonias. De ahí la necesidad de construir escaleras eléctricas y un elevador inclinado.
El programa de rescate del Colectivo 18 se llama Escalando Vidas, Tejiendo Destinos y tiene una inversión global de 158 millones de pesos, de los cuales 82 millones están destinados a la constricción de las escaleras eléctricas y el elevador, un proyecto que es asesorado por la Empresa de Desarrollo Urbano, una paraestatal de la alcaldía de Medellín.
Las obras de construcción arrancan esta semana y de acuerdo con el contrato que se firmó con la empresa Constructora LMI S.A. de C.V., ganadora de la licitación pública nacional 30001133-001-20, deberán estar concluidas en los primeros días de diciembre de este año.
En el caso de la Comuna 13 se trata de seis tramos de escaleras eléctricas con senderos peatonales y espacios iluminados, para mejorar la percepción de seguridad. En el caso de Álvaro Obregón habrá tres descansos en los que se habilitarán espacios comerciales de gente de la misma comunidad.
ATENDER A LOS INVISIBLES
En entrevista con El Sol de México la alcaldesa de Álvaro Obregón, Layda Sansores señala que la construcción de las escaleras eléctricas al estilo Medellín es una “excusa para hacer una serie de acciones que convierten el programa de Escalando Vidas en un programa de desarrollo urbano integral. Las escaleras son un 10 por ciento de todo el proyecto”.
Y es que el programa también incluye, entre otras cosas, la renovación del alumbrado público, la colocación de cámaras de seguridad, la sustitución de la red de agua potable y drenaje, la remodelación del mercado Corpus Christi, la habilitación de un aula digital con servicio de computadoras e internet, rehabilitación de andadores, escaleras fijas y viviendas.
“Primero tienes que hacer una serie de cambios en las comunidades en las que se trabaja de tal manera que termines por modificar su entorno social, pero también su paisaje espiritual. Que ellos se vean en nuevos horizontes, que recuperen la autoestima (…) han sido comunidades invisibles y queremos que recuperen esa entereza de estas colonias que formaron hace más de 30 años”, apunta la alcaldesa.
La funcionaria comentó que para generar un sentido de pertenencia en la gente sobre el proyecto se realizaron 266 talleres con la comunidad para que los mismos vecinos plantearan lo que querían para su comunidad. “Son personas que han tenido muchas carencias, enfermedades (…) Hubo mucho resistencia al principio porque los cambios requieren rupturas, nos es fácil a veces romper ni un vaso, ahora romper esquemas de vida a los que te acostumbraste por 30 años, es complicado, es un reto al que nos estamos enfrentando”.
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