Como entidad, la capital del país, la ahora Ciudad de México, es el centro de las miradas electorales junto con el Estado de México. El puesto de jefe de gobierno es uno de los principales trampolines políticos para llegar, cuando menos, a la candidatura para Presidente de la República.
Los tiempos electorales aún no permiten saber quién está oficialmente en la carrera para el cargo, pero algunos personajes ya están en la ‘lista extraoficial’, como Claudia Sheinbaum, actual delegada de Tlalpan; la senadora por el PANMariana Gómez del Campo.
La senadora Dolores Padierna también mostró interés en el puesto, cuando era perredista.
Además están en la ruta, mediante la vía independiente, 12 candidatos: Xavier González, Lorena Osornio, Humberto García, Hugo Rodríguez, Ana Lucía Riojas, Pedro Pablo de Antuñano, Christian Vázquez, Elsa Patria Jiménez, Alfredo Solar, Rocío Artemisa Montes, Rafael Pontón y José Luis Luege Tamargo.
Pero si bien es un puesto en el que se centran las miradas políticas, es también ahora en donde recae una serie de responsabilidades, la mayor: gobernar para ocho millones 918 mil 653 personas (Instituto Nacional de Estadística y Geografía, INEGI), que conviven en mil 495 kilómetros cuadrados.
Quienes buscan gobernar esta entidad para el siguiente periodo se van a encontrar con 16 delegaciones (alcaldías) con una gran diversidad, lo que significa que las necesidades son tan variadas como diametrales, tanto por sus poderes adquisitivos como por sus usos y costumbres.
En lo inmediato, el eventual ganador se enfrentará a una ciudad en reconstrucción, que al día de hoy no cuenta con un censo completo de viviendas inhabilitadas o dañadas, personas damnificadas, calles fracturadas, ni con un presupuesto real que indique cuánto se llevará la reconstrucción.
La inseguridad será otro de los temas sensibles. El Observatorio Nacional Ciudadano (ONC) y el Semáforo Delictivo dieron a conocer que este año aumentó el número de homicidios relacionados con el crimen organizado, con 13 mil 513 casos de enero a septiembre.
El servicio de agua potable y drenaje se agrega a los retos actuales y que son de largo plazo. Pese a que desde hace décadas se habla de convertir la ciudad en sustentable en esta materia, cada año los recortes para el organismo se amplían, al mismo tiempo que las tuberías se hacen viejas, se rompen y no sólo provocan pérdida del líquido, así como falta de suministro, sino también deriva en socavones que ponen en riesgo a la población.
En materia política, en los últimos tres años la sociedad ha visto una de las mayores fracturas, provocada por falta de consensos en la Asamblea Legislativa, y que ha polarizado a sectores sociales.