El Río Tacubaya, en el tramo que atraviesa el Bosque de Chapultepec, será saneado y rehabilitado ya que actualmente recibe más de 100 descargas de aguas negras, las cuales son fuentes de enfermedades infecciosas.
La Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema) limpiará el río este año porque atraviesa parte de una obra federal, el Complejo Cultural Bosque de Chapultepec y lo hará a través de la licitación del proyecto “Restauración del Río Tacubaya a partir del uso de separadores hidrodinámicos y biodigestores”.
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“El tramo propuesto para la rehabilitación forma parte del entorno de la futura IV Sección del Bosque de Chapultepec, sitio que se espera reciba próximamente visitas masivas de la población asociadas con la creación de nuevos espacios culturales”, explica la Secretaría de Medio Ambiente local.
La rehabilitación implica la construcción de un sistema de alcantarillado, pavimento con concreto hidráulico, construcción de vialidades, banquetas y andadores para peatones.
La dependencia capitalina explicó que el saneamiento también implica la tala de árboles y arbustos, el retiro de la vegetación y forestación con árboles, arbustos y hierbas.
Sedema encontró que el agua del río está contaminada y lo sostiene con varios estudios, entre ellos el llamado “Determinación de la concentración de metales pesados, antimonio, hidrocarburos y calidad del agua del río y pozos en la barranca del río Tacubaya (Área de Valor Ambiental)”.
El Río Tacubaya tiene una trayectoria que inicia en la alcaldía Cuajimalpa y atraviesa Álvaro Obregón, está entubado a partir de la Presa Mina Totolapa, hasta llegar a Santa Fe, donde aflora en las cercanías de la Casa del Agrónomo con un caudal de 353 litros por segundo.
La contaminación, de acuerdo con Sedema, tiene su origen en las descargas sanitarias que provienen de los márgenes del río, donde no hay un sistema adecuado para la captación y procesamiento del agua residual que desemboca directamente a la barranca. Hace un año, Julián Zarco, jefe de la Unidad Departamental de Túneles del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), explicó a este diario que el líquido que está en las presas capitalinas no puede usarse para consumo humano porque una parte viene de los aguaceros y otra de las barrancas, en las que hay asentamientos irregulares, cuyas descargas domiciliarias terminan en las laderas.
Como parte del Complejo Cultural Chapultepec, la zona de la barranca debe tener las condiciones adecuadas con el menor riesgo posible para la salud de los visitantes y del personal que laborará en el sitio.
El río corre por el Área de Valor Ambiental Barranca Tacubaya, la cual forma parte de la cuenca del Valle de México que, por sus características no tiene salida natural de sus aguas debido a un conjunto montañoso que condiciona el drenaje natural del valle.
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La licitación del proyecto indica que los trabajos deben comenzar el 2 de agosto de este año, para concluirse el 31 de diciembre, también del 2023.
“El uso público al Área de Valor Ambiental Barranca del Río Tacubaya y de las áreas exteriores de la futura cuarta sección del Bosque de Chapultepec deberá realizarse en un ambiente adecuado para el esparcimiento y con el menor riesgo posible tanto para la salud de los visitantes como para el personal que laborará en el sitio”, indica la Sedema.