A los problemas generados por el incendio más reciente registrado en parte de la Nave Mayor de La Merced, surge otro debido a que los comerciantes tienen incertidumbre sobre si conservarán sus puestos, luego de que concluyan las obras de remodelación.

Con carteles y de viva voz, los comerciantes de ese centro de abasto manifiestan estas dudas, mientras que los trabajadores ya empiezan la demolición del área afectada dentro del inmueble.

En total son 736 puesteros, correspondientes a las puertas 17 a 23, quienes consideran que están en riesgo sus locales, una vez que terminen los trabajos de reparación de la Nave Mayor.

El incendio más reciente en ese centro de abasto se registró precisamente en la Nochebuena del año pasado, lo cual dejó como saldo dos personas muertas a causa de una descarga eléctrica y 600 locales aproximadamente destruidos por completo.

A un mes del siniestro, en el inmueble se aprecian las paredes y el techo ennegrecido por el fuego y los locales arrasados, a pesar de lo cual los comerciantes se aferran a sus puestos para salir adelante con la venta de productos, como bolsas, frutas, verduras, juguetes, carne de res, de pollo y cerdo, así como abarrotes entre otros, que pudieron rescatar.

La Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México dio a conocer que el fuego se debió a un corto circuito, la misma causa que provocó que otros que cuatro mercados de la Ciudad de México se hayan quemado en los últimos días de 2019 y los primeros de este año.

Cuando se les pregunta si ya recibieron los apoyos prometidos por las autoridades, como es el caso de los seguros de desempleo, así como 25 mil pesos que se les dará para la adquisición de mercancía, los comerciantes responden irónicamente que aún no y cuando lo hagan van a invitar los tamales y el atole para los preguntones.

La incertidumbre está presente en los rostros de los comerciantes afectados por el incendio, que aún no han sido reubicados, ante lo cual el secretario de Desarrollo Económico, Fadlala Akabani, aseguró que es cuestión de días para que se les asigne un lugar provisional.

En entrevista, el funcionario informó que falta la autorización para que dicha dependencia pueda adquirir rápidamente las carpas en las cuales se colocarán a los comerciantes afectados, porque el espacio al que serán trasladados ya está listo.

Al hablar de la incertidumbre de los locatarios, a fin de que les sea respetado su lugar, precisó que ese asunto está en manos de la alcaldía Venustiano Carranza, que es la autoridad que les debe otorgar la cédula y quien la tenga solamente podrá usar el local.

“Quienes tengan su cédula de locatario no tienen por qué perder sus locales, los que no la tengan ya es otra cuestión”, expresó el secretario de Desarrollo Económico.

Cabe señalar que la parte que se quemó de la Nave Mayor estaba dentro de un área que estaba sin reparar desde el incendio registrado en 2013 y que la obra correría a cargo del Gobierno Federal.

Los locatarios de La Merced temen que no les arreglen en el tiempo estimado sus lugares de trabajo, ya que en otras ocasiones les han prometido sin cumplirles.

La demolición del techo del inmueble se debe a que la conflagración lo afectó estructuralmente y se estima que la reparación de esa área quede lista este año.