A su paso generaron caos, vandalizaron estaciones del Metrobús, monumentos históricos como el Ángel de la Independencia, y hasta hicieron que se replegara la fuerza femenil de la policía de la Ciudad de México, sin que nada ni nadie pudiera controlar a mil 500 feministas que protestaban contra el presunto abuso sexual de policías y que acabaron en la anarquía total.
"Exigir justicia no es provocación", respondieron mujeres a las jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, durante la manifestación que se prolongó por más de cuatro horas. Durante el mitin pedían justicia, pero a su vez generaban violencia.
"Ni una más, ni una más, ni una asesinada más", iniciaba la marcha dentro de la Glorieta Insurgentes frente a la Secretaría de Seguridad Ciudadana. "Exigimos que se apliquen programas para prevenir la violencia de género", sentenciaron a la administración capitalina.
No pasaron ni 20 minutos en su transcurso cuando ya el primer contingente de mujeres vestidas de negro y con un pañuelo sobre el rostro empezaron a romper los vidrios de la estación del Metrobús Insurgentes que terminó incendiada. También pintaron la estación con las frases "policías violadores" "puercos".
Incendiaron las oficinas de la Secretaría de Seguridad Ciudadana y no permitieron el paso del Heroico Cuerpo de Bomberos, incluso grafitearon e impidieron el paso de uno de los cuatro camiones que llegaron a la zona. Tampoco tuvieron suerte las ambulancias de la Cruz Roja que intentaban arribar.
El grupo de mujeres policías que custodiaba la zona fue agredido. Las mandaron sin protección, sólo fueron una figura que no pudo poner orden entre el caos reinante.
Entre gritos pedían "Ni una más, ni una asesinada más", sin embargo, las mujeres empezaron a agredir a reporteros. Los hombres reporteros o fotógrafos fueron agredidos con aerosol en sus Rostros y en su equipo. Después las reporteras también fueron agredidas.
Con los ánimos enardecidos caminaron hacia el Ángel de la Independencia, monumento histórico que no mereció respeto y que también fue vandalizado en la parte baja. En la calle de Florencia alguien gritó que la policía había detenido a integrantes de la protesta y una de las líderes entró a la estación de policía a verificar que no era cierto. La protesta concluyó más allá de las 22:00 horas
RESPONDE GOBIERNO
La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, les mandó un mensaje: la violencia no se combate con violencia.
En un comunicado, el gobierno de la Ciudad de México les señaló: "Atender la demanda legítima de erradicación de la violencia de género es esencia de nuestro programa de Gobierno y por ello, hemos desarrollado diversas acciones como Mujeres Abogadas en cada Ministerio Público; Red de Mujeres por la Igualdad y la No Violencia; 27 Centros de Atención Integral y tres Centros de Justicia para las Mujeres, que son apenas el inicio de un programa integral que estamos construyendo con diversas organizaciones de mujeres.
Sobre la manifestación del día de hoy (viernes), respetamos a la mayoría que lo hicieron de manera pacífica, para ellas las puertas de la Ciudad de México están abiertas para el diálogo franco, sin embargo, no se puede justificar la violencia de unas y unos cuantos que solo empañan la defensa de los derechos de las mujeres. La violencia no se combate con violencia".