Como parte de la estrategia de movilidad integrada, las líneas 6 y 7 del Metrobús tendrán un nuevo Sistema de Peaje y Control de Acceso, con lo que se adquirirá un nuevo software que contempla la aceptación del pago con tarjetas de débito y de crédito emitidas por entidades financieras nacionales o internacionales.
Con ello sumarían seis líneas que fomentan el desuso de dinero en efectivo y que, de acuerdo con la Secretaría de Movilidad de la Ciudad de México (Semovi), los usuarios ahorrarán tiempo en el proceso de abordaje a los transportes.
El sistema ya opera es en las líneas 1, 2 y 3, y está por funcionar en la 4.
Este proyecto forma parte de la modernización del sistema de peaje de las líneas del Metrobús, mediante el uso de tecnologías innovadoras que reducen el uso de efectivo en el transporte público y generan más opciones de pago y acceso para las y los usuarios. Las empresas que resulten ganadoras en el concurso, cuyo fallo se dará a conocer el 14 de junio de 2022, prestarán los servicios durante un periodo de siete años forzosos.
La adjudicación del proyecto, socializado a través de Tianguis Digital de la Ciudad de Mëxico en el apartado de proyectos de contratación pública que están en planeación y abierto a discusión pública, prevé que la implementación del nuevo sistema de peaje se realizará entre el 10 de octubre y 25 de noviembre de 2022 en la Línea 6; y en la Línea 7 del 28 de noviembre al 4 de marzo de 2023.
En el caso de la Línea 6, que corre sobre Eje 5 Norte, el 5 de mayo de 2015 se suscribió un convenio con la Promotora Inbursa SA de CV, para los servicios de peaje durante un plazo de siete años, con una contraprestación anual de 39 millones 999 mil 451.43 pesos. El contrato está a un mes de vencer.
En tanto, en la Línea 7 es la empresa Thales la que lleva el control del sistema de peaje, a través de un contrato que le da esta facultad para un periodo de cinco años, con una contraprestación de 35 millones 797 mil 600 pesos anuales.
La empresa que resulte ganadora de esta licitación deberá garantizar la implementación de toda la infraestructura de hardware, entre las que destaca la instalación de cámaras IP (con conexión a Internet) para registro de incidencias, grabadoras de video, un dispositivo que mande a la base de datos el conteo de cada uno de los usuarios que entran y salen por las puertas del autobús, lector de tarjetas sin contacto que realiza la validación del saldo en las Tarjetas de Movilidad Integrada, entre otros.
Y del software, el sistema debe permitir el monitoreo vía remota del funcionamiento de los equipos de venta, recarga y validación de la Tarjeta de Movilidad Integrada, de forma permanente en el horario completo de servicio y fuera de él.
El software debe generar alertas para el mantenimiento correctivo y/o preventivo de los equipos, gestionar el mantenimiento de los equipos de peaje, tener un historial de mantenimiento de cada equipo, generar incidencias y estadísticas de desempeño, entre otras tareas.
La contratación del servicio de peaje, en uno de sus ejes de acción, abarca la geolocalización de autobuses, función que está relacionada directamente con el control de acceso para que la validación se registre a bordo del autobús, identificando el parabús o estación donde se realiza la validación.
Las máquinas de autoservicio para la venta y recarga de la Tarjeta de Movilidad Integrada permitirán las recargas haciendo uso de CoDi, con lo que los pagos pueden realizarse desde los celulares.
Las máquinas deben estar preparadas para interactuar con el sistema que permite gestionar remotamente la seguridad de las transacciones realizadas a través de una API (Application Programming Interface) para interacción con medios de pago.
El Sistema de Peaje y Control de Acceso debe aceptar el pago con códigos de barras 2D por medio de una aplicación móvil en la cual, previo registro del usuario, se genera un código QR para pagar el pasaje en los validadores que se ubicarán en terminales y estaciones.
