Un año se fijó como meta la futura jefa de Gobierno electa, Claudia Sheinmbaum, para dar resultados en la reducción de la seguridad y para ello prometió limpiar a la Secretaría de Seguridad Pública de la corrupción, a la vez que convocó a la a la Iglesia, a la sociedad civil y a los ciudadanos a trabajar en la prevención del delito.
En Casa Lamm de la colonia Roma, en la alcaldía de Cuauhtémoc, Sheinbaum presentó parte del gabinete de seguridad: el jefe de la policía será Jesús Orta Martínez; el coordinador del gabinete de seguridad y procuración de justicia, Tomás Pliego Calva; y el presidente del Consejo Ciudadano de Seguridad y Justicia será Salvador Guerrero Chiprés.
Fue ahí que Orta Martínez –exoficial Mayor en la recta final del gobierno de Marcelo Ebrard- dijo: “La estrategia tiene que dar resultados en el primer año de actuación”, y acotó: “El fenómeno criminológico es muy amplio, hay delitos que tardarán más tiempo y otros en unas cuantas semanas o meses se verán reflejados en la percepción ciudadana”.
Por su parte, la mandataria electa descartó la presencia de la futura Guardia Nacional o el Ejército en las calles de la capital; “tenemos confianza de que con la propia policía vamos a estar coordinados”.
De esta manera, puntualizó Orta, se echará mano de las fuerzas federales únicamente para operativos especiales.
Otro de los focos de atención será no usar a la policía para reprimir a la población, ya sea en marchas u operativos policíacos, incluso, detalló Jesús Orta, se invitará a personal de la Comisión de Derechos Humanos y representantes de la sociedad civil a algunas de las intervenciones de la policía para verificar que se respeten los derechos humanos de la ciudadanía.
Orta se dijo sabedor de las condiciones de inseguridad que padece la ciudad y en ese sentido dijo: “Los focos rojos están identificados, en lo que tenemos que entrar de manera inmediata es atender el incremento en homicidios dolosos, también en el robo en transporte público”.