La empresa de scooters Grin, que actualmente opera en la prueba piloto gracias a una resolución judicial, quedaría fuera de la regulación permanente, que se emitirá el 25 de marzo, al ser la única que no cumplió en tiempo y forma con los lineamientos de los permisos temporales.
Al presentar la estrategia de Género y Movilidad, el secretario Andrés Lajous detalló que Grin promovió dos amparos: uno para frenar el retiro de sus patines durante la prueba piloto tras haber incurrido en incumplimiento y otro en contra del permiso temporal.
Si bien hay seis empresas que sí cumplieron en tiempo y forma con las reglas del permiso temporal, Grin fue la única que no se apegó a lo establecido en el documento, por lo que tuvo que recurrir a amparos.
De estos dos amparos, abundó, en el primero se le concedió la suspensión provisional, por lo que los scooters de Grin pudieron seguir dando servicio y la Secretaría de Movilidad quedó impedida para retirarlos de las calles.
El segundo se inició en contra del permiso temporal de 45 días que se emitió el pasado 6 de febrero, pero en este caso Grin no obtuvo la suspensión provisional, por lo que el juicio sigue su curso y se estima que esta empresa quede fuera de la regulación permanente.
Lajous Loaeza afirmó que los lineamientos permanentes que se presenten el 25 de marzo estarán nutridos por las diversas opiniones y sugerencias de las empresas que prestan el servicio de bicicletas compartidas sin anclaje y de monopatines eléctricos.
“No queremos imponerles unas reglas que sean absolutamente descabelladas con respecto a su modelo de negocio, queremos que funcionen, pero de forma ordenada”, dijo luego de empresas como Lime informara que la reducción de cinco mil a 500 scooters ha afectado su operatividad, por lo que demandaron que se permitiera un mayor número de unidades en operación.