El presidente del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México (TSJ), Rafael Guerra Álvarez, pidió a los diputados del Congreso capitalino ser cuidados con la regulación del gas pimienta como herramienta de defensa personal para que no se convierta en un arma que genere daños mayores.
Al participar en un foro convocado por el diputado de Morena, Nazario Norberto –impulsor de la iniciativa- el magistrado señaló que al buscar garantizar la tutela de los derechos de las víctimas podrían vulnerarse los derechos de terceros, en este caso los agresores.
“Hay que ver qué consecuencias tiene el uso, hasta dónde afecta a la persona. A lo mejor quien lo use le haga más daño al agresor al quererse defender”, comentó.
El diputado Norberto discrepó de la postura del presidente del TSJ al cuestionar que “si quieren secuestrar o violar a una mujer, cómo se va a defender. Es el bien tutelado de una violación o una lesión, un feminicidio o una lesión. Las mujeres no pueden tener un policía atrás”.
Llamó la atención que en la Ciudad de México el uso del gas pimienta “no se encuentra regulado en el Código Penal, no es un delito, pero si a una persona la encuentran con uno la llevan al juez cívico y tiene que pagar una multa porque es un arma”.
Por ello destacó que se realizarán otros dos foros con expertos, académicos y sociedad civil para profundizar el análisis de la legalización o no del uso de gas pimienta como herramienta de uso personal.
USO NO LETAL
El director de Servicios Médicos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana, Jorge García, detalló que el uso del gas pimienta no es letal en las personas que reciben la carga y por ello varios países lo han regulado, aunque en cantidades menores.
Explicó que el componente activo del gas pimienta es la Capsaicina, sustancia que contienen los chiles y que produce una falsa sensación de dolor en el organismo.
La Capsaicina en el gas pimienta llega a ser entre seis y ocho veces más fuerte que el picor de un chile habanero.
Detalló que no está comprobada la muerte de alguna persona que haya sido atacada con un gas pimienta y las lesiones son auto producidas como laceraciones en la córnea por tallarse en exceso los ojos.