Al arrancar el proceso el electoral para elegir al próximo jefe de gobierno de la Ciudad de México, las 66 diputaciones, las 16 alcaldías, con diez concejales cada una, el nuevo árbitro de esta contienda, Mario Velázquez Miranda (Santiaguito Maxdá, Estado de México) se dio cuenta que la tarea de llevar al mayor número de personas hasta las urnas no será tan sencillo. Tendrá que sacudir al padrón electoral de la desconfianza hacia los postulantes, porque bien sabe del desencanto que han generado los partidos políticos.

El presidente del Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) arriba a sus oficinas, al sur de la capital, con todo el tiempo encima. Viene de un encuentro de trabajo desde el Centro de la capital, y el día aún está a la mitad. Muy afable, Mario Velázquez recibe al Sol de México. La corbata ya cuelga en el perchero, es necesario el respiro para poder explicar cuál es su estrategia para atraer la confianza de los electores (a 2015, 4,050,479  mujeres y 3,629,348 hombres.) “No hay de otra. El ciudadano debe ir a dejar su voto, pero informado acerca de qué va a elegir”.

-¿ En qué momento estamos del proceso electoral?

El proceso electoral en la Ciudad de México inició formalmente el 6 de octubre, a través de la sesión del Consejo Electoral del IECM al declarar formalmente el arranque de la contienda. El proceso se divide en cuatro etapas. La más amplia es la de la preparación, y arranca esa primera semana de octubre y termina el día de la jornada de electoral: el 1 de julio de 2018. 

Ese día, a las 8:00 de la mañana, se abren las casillas y se comienza la votación. La tercera etapa es con el cómputo distrital. En el caso de la Ciudad de México es la noche del 1 de julio, al cerrar las casillas, el paquete que lleva todos los documentos y se entrega al consejo de distrital. La cuarta es de la validación. Es el momento en que se dan todos los medios de impugnación.

La etapa más compleja, reconoce Velázquez Miranda, es la de preparación, y explica: “Es el momento en que tenemos que preparar todos los instrumentos para que las elecciones se lleven de manera óptima. Elementos materiales y humanos. En este último punto intervienen vecinas y vecinos. No son servidores públicos, pero sí funcionarios electorales. Ahora son seis ciudadanos quienes integran la Mesa Directiva de Casilla, con esta nueva figura, que es la casilla única, se evitó que hubiera dos mesas.

Con la Reforma Política de 2014, con la que se avaló la elaboración de la primera Constitución  de la Ciudad de México  -formalmente establecida el pasado 5 de febrero- se creó una nueva administración para la capital del país en la que se incorpora las figuras de alcaldes y concejales. Ahora la elección de esos cargos estarán en juego.

A nivel nacional, explica el presidente del IECM, se juegan los cargos de Presidente de la República, senadores y diputadas y diputados.

“En el ámbito local, los candidatos a jefatura de gobierno y los diputados, quienes integrarán el primer Congreso local, que hasta hoy funciona como Asamblea Legislativa. Y una nueva figura: la alcaldía, conformada por un alcalde y seis concejales electos en la misma boleta, por mayoría relativa, Y cuatro concejales de representación proporcional para tener un equilibrio de las fuerzas políticas que, desde luego, no alcancen un triunfo, pero les que permita estar representadas.

Y el trabajo para lograr la confianza es desde esa primera etapa de preparación. Mario Velázquez sabe de lo importante que es la transparencia. En 2006 se fue a trabajar al Instituto de Acceso a la Información Pública y Protección de Datos Personales del Distrito Federal (InfoDF), donde fue director del área Jurídica.

“En este arranque lo que hemos tenido que establecer son los mecanismos para que las casillas funcionen debidamente con las personas, con los materiales: desde las mesas en las que van a trabajar los ciudadanos. Las urnas, las portaurnas, los  canceles, las propias boletas que tienen características muy propias, las actas y todo lo de ‘oficina’ que se requiere para garantizar el trabajo en la casilla.

LOS MOMENTOS DEL IECM

“Como organizadores de las elecciones locales el principal reto que enfrentamos es la desconfianza con la que se arranca el proceso electoral. Me parece que la Ciudad de México, en el país, los ciudadanos tienen una gran desconfianza, no solo en las instituciones , sino también en quienes son los actores fundamentales, que son las fuerzas políticas... Los partidos políticos enfrentan una gran desconfianza en términos de lo que la ciudadanía prevé. Y lamentablemente lo que esta desconfianza lleva es el abstencionismo, el tratar de evitar tomar una decisión que es fundamental..

Ahí es donde el IECM enfrentará dos momentos. Uno, que la ciudadanía participe, pero que esa participación sea informada, es decir, cuando acudan a la urna tengan elementos que les permita decidir quiénes van a aparecer en las boletas, información que está fundamentalmente enfocada en las plataformas políticas, lo que se denomina la ofertar política de candidatos y partidos, lo que constituye el plan de gobierno a emprender. Los ciudadanos deben tener cuidado en revisar en quién recae lo que se de  ciudad. Otro reto es comunicar cuáles son los perfiles. Podemos advertir si su desarrollo político le permite alcanzar la oportunidad de ser gobernante.

LOS DEBATES

Para Mario Velázquez, en el proceso electoral, sin duda, el intercambio de propuestas entre los candidatos es fundamental para que el electorado pueda discernir entre las ideas de uno y otro, elemento necesario.

“El hecho de estar en un debate se obliga a dar respuestas o qué ocurre cuando es cuestionado. El ciudadano tiene aquí un elemento informativo.

“Debemos concientizar a la ciudadanía de la importancia del voto, porque en las últimas épocas hablar de voto era pensar que se está ante una situación de obtener una prebenda, un servicio o dinero. Pero nuestro reto es darle al voto el valor de que no es así para obtener un buen gobierno”.

-¿Cuál es el beneficio del Congreso local?

“Las atribuciones que ya se tienen en algunas entidades federativas, porque actualmente con la ALDF se tienen ciertas restricciones”.

Los diputados serán electos de manera diferente: se tendrán que elegir 33 por mayoría relativa y 33 de representación proporcional. Esta integración del Congreso local será mucho más plural, porque permitirá a los partidos políticos que tienen una menor votación la posibilidad integrarse al Congreso. Y la mitad de ese órgano debe ser de varones y la otra de mujeres. Y así lo ordena la nueva Constitución, para que la mujer esté representada, de ser paritario. La otra figura es la alcaldía, integrada por una alcaldesa o alcalde. La alcaldía, entonces, es un gobierno colegiado. “El alcalde deberá estar sujeto al cuerpo colegiado. Quien gana la alcaldía lo hace con seis concejales. Los otros cuatro concejales serán aquellos que, en una lista plurinominal, establezcan los partidos. Serán ‘los mejores perdedores’, por así decirlo de esa alcaldía.

Camino de los  sin partidos

En la nueva forma de democracia que se pretende instaurar en la ciudad también entran a la oportunidad de elección los ciudadanos que, de manera independiente, se postulan a un cargo de elección popular, y esto aparece como un derecho constitucional: a jefe o jefa de gobierno. Diputado o diputada. Alcalde o alcaldesa o concejal. “Ahora estamos en el plazo de los registros para quienes aspiren a diputados o diputadas al Congreso y alcaldes o alcaldesas.

Los conteos y el PREP

En la Ciudad de México, al terminar la jornada electoral, a las 18:00 horas, el flujo de la información, de la tendencia que lleve tal o cual candidato postulado para la jefatura de gobierno, solo en este cargo, estará comandada por las autoridades del Instituto Nacional Electoral (INE). Para el arrojo de datos sobre diputados, alcaldes y concejales se deberá queda en manos del IECM, que, en voz de Mario Velázquez, “peleó para quedarse con toda la elección. “Tenemos la experiencia, sabemos cómo hacerlo, pero, bueno, así quedó”.

Explica el proceso de los resultados: “Se cierra la casilla, inicia el escrutinio, se cierra el paquete y se entrega al Consejo Distrital. Ahí inicia el cómputo, no se va hasta el otro día. Se comienzan a registrar las actas, se abre la casilla, se comienza a hacer la sumatoria de los votos que hicieron los ciudadanos.

“El CAE o CAEs (Capacitadores de Asistencia Electorales, que dependen del INE) es fundamental para que los capitalinos tengan la información más inmediata sobre los conteos rápido, tanto presidencial como a jefatura de gobierno.”

Mario Velázquez adelanta que se dará un informe junto con el INE con respecto al territori marcado para la distribución de las casillas, luego de que el sismo del 19 de septiembre pudiera haber afectado alguna vialidad o territorio para este fin, como por ejemplo en Xochimilco o Tláhuac, por el asunto de las grietas en paso vehicular, por lo que ya trabajan en campo para garantizar el punto de votación.