Casi 600 promotores culturales han dejado de ser parte de la plantilla laboral de los Puntos de Innovación, Libertad, Arte, Educación y Saberes (Pilares -programa clave para la capacitación de jóvenes que buscan empleo), pese a que estos centros van en aumento, pues actualmente hay 216 instalados de 300 que están programados para este año.
Desde que inició el programa en 2019 hasta la fecha se han reducido los talleristas, pues de mil 800 quedaron mil 278. Este año 100 promotores culturales que forman parte del programa Talleres de Artes y Oficios Comunitarios, a cargo de la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México, fueron recortados debido a una "optimización de recursos para garantizar los materiales necesarios".
“Los ajustes en las Reglas de Operación se deben a la optimización de recursos para garantizar los materiales necesarios en las actividades culturales; cabe resaltar que estos ajustes no interfieren en los objetivos de los programas”, señaló la Secretaría de Cultura de la Ciudad de México el pasado 18 de marzo.
La jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, confirmó a El Sol de México que el porcentaje correspondiente a salarios de los trabajadores de cultura que fueron recortados será utilizado para los materiales.
“Se hace un proceso para ubicar (a los beneficiarios). La selección no depende necesariamente de las capacidades, muchas veces depende de que las personas vivan en el lugar en donde es el Pilares, porque nosotros queremos que haya una vinculación de Pilares y sus promotores con la comunidad. Entonces, se hizo este proceso de trabajo de selección y se decidió que fueran estos promotores”, apuntó la mandataria capitalina.
Luanda Rodríguez, quien formaba parte desde 2020 del programa promotores culturales comunitarios de Talleres de Artes y Oficios y Colectivos Culturales Comunitarios, asegura que fueron remplazados por docentes o talleristas de autonomía económica.
“Nuestros principales ejes son brindar y realizar cine club (proyecciones de películas educativas y culturales), libro club y sesiones de libros; es decir, incentivar la lectura en infancias, pues trabajamos también en escuelas y parques”, indicó Luanda.
En un recorrido realizado por El Sol de México un promotor de un Pilares ubicado en Eduardo Molina, en la alcaldía Gustavo A. Madero, confirmó que realizan labores culturales quienes no fueron aceptados como docentes de Ciberescuela por la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (Sectei), que se encarga de esta plantilla.
“Gente que no fue aceptada por Sectei como docentes (en ciberescuela) o talleristas de autonomía económica, ahora ya son promotores culturales. No tienen perfil de promotores de cultura, son personas que emigraron a cultura”, indicó a este diario un docente de Pilares que prefirió el anonimato.
SOSTIENEN REUNIÓN CON BATRES SIN AVANCES
El pasado miércoles 23 de marzo y lunes 28 de marzo extalleristas de cultura sostuvieron reuniones con el secretario de Gobierno de la Ciudad de México, Martí Batres Guadarrama, así como con representantes de la Secretaría de Cultura.
Una de las asistentes a las reuniones fue Luanda Rodríguez, quien señaló que no se les dio solución a sus demandas; sin embargo, continuarán con las exigencias para mantenerse en el programa.
“Dijo que no (Martí Batres), que básicamente no teníamos razón y que el programa no podía ampliar su capacidad.
Llegábamos a trabajar hasta 14 horas al día, tenemos un jefe inmediato y una remuneración, pero no nos reconocen como trabajadores. Vamos a continuar con las exigencias para seguir trabajando con nuestras comunidades”, indicó Rodríguez.
En tanto, la Secretaría de Cultura, a través de su Oficina de Comunicación Social, aclaró a El Sol de México que que los promotores forman parte de “programas sociales” que no se consideran un empleo, y aseguró que estos proyectos buscan llegar a la mayor cantidad de personas.