Tres días de reuniones entre la Secretaría de Gobierno y la de Movilidad con transportistas concesionarios de ruta y corredores derivaron en cuatro acuerdos: acceso a la salud para los operadores, regularización jurídica y supervisión, sustitución de las unidades más viejas y entrega de bonos de combustible como una manera de evitar el aumento en la tarifa que se cobra a los usuarios de estos modos de transporte.
En un comunicado la Secretaría de Movilidad informó que tras mesas de trabajo celebradas los días 17, 18 y 19 de febrero se lograron alcanzar estos acuerdos. Dicho avance, de hecho, evitó la mega marcha convocada para este miércoles por parte de la Fuerza Amplia Transportista, con la cual se esperaba un caos en la Ciudad de México.
El primero acuerdo, sobre la dignificación de la situación de los operadores, se tiene contemplado adherirlos a los servicios de salud del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), costo que estaría a cargo del Gobierno de la Ciudad de México.
En cuanto a la profesionalización no sólo se comprometieron a usar uniforme, también acudirán a sensibilizaciones y talleres de diversa índole, así como cursos impartidos por el Centro para el Fomento de la Educación y Salud de los Operarios del Transporte Público de la Ciudad de México (CENFES A.C.) y el Instituto de Capacitación para el Trabajo (ICAT).
La regularización se centrará en actualizar toda su documentación y para ello la Secretaría de Movilidad “agilizará toda la tramitología necesaria para que los prestadores de servicio puedan estar al corriente a la brevedad. Con esto, se dará prórrogas a quienes así lo soliciten para, con ello, otorgarles certeza jurídica y poder desarrollar los Nuevos Títulos de Concesión a ser otorgados”.
No obstante, también se acordó el cumplimiento del Reglamento de Tránsito y para ello se prevé el uso de las tecnologías del C5 a fin de mejorar el ordenamiento vial, así como la creación de un sistema de sanciones a través de puntos. En caso de que los operadores pierdan la totalidad de sus puntos, su licencia para conducir será dada de baja.
Por su parte el Instituto de Verificación Administrativa apoyará con revisiones preventivas con certidumbre sobre criterios homologados de cumplimiento.
El tercer acuerdo es la sustitución de las unidades con mayor antigüedad, que es de hasta 25 años, por otras nuevas que cumplan los más altos estándares. “Para ello, se contará con diversos mecanismos acordes al nivel de demanda de los servicios en cada ruta. Dichos mecanismos se dialogarán en mesas de trabajo para lograr un proceso transparente”.
Finalmente, para evitar un incremento en la tarifa al usuario, se darán subsidios para el combustible que utilizan todas las unidades de transporte de ruta y corredor concesionado. Así, será posible implementar mejoras del servicio sin afectar a la economía de la ciudadanía y mejorando, a la vez, la situación de los costos de operación de los concesionarios.