Los bomberos locales contarán al final de este sexenio con 100 unidades más para atender emergencias, por lo que su flotilla será de 400 vehículos aproximadamente, prometió hoy Clara Brugada, jefa de Gobierno de la Ciudad de México.
El Zócalo capitalino amaneció con 11 camiones de bomberos nuevos, cinco de ellos son bombas contra incendios, cuatro autotanques y dos unidades de respuesta, que se suman a los 282 automotores con que cuenta actualmente la institución.
La jefa de Gobierno estuvo en la Plaza de la Constitución para entregar los equipos y le explicaron su funcionamiento, fue entonces cuando asumió el compromiso de dotar de 100 unidades más a los “vulcanos” en los próximos seis años, de manera que tengan 400 vehículos para atender las emergencias que se presenten en la , ese, señaló, es el objetivo.
“Queremos culminar el sexto año de gobierno con un gran equipo de bomberos, totalmente equipado y sé que también hacen falta subestaciones o estaciones, así que mi compromiso es la instalación de cuatro más subestaciones de bomberos para esta gran Ciudad de México, esto tendrá muchos beneficios”, manifestó Brugada Molina.
La jefa de gobierno recordó que los bomberos de la capital cubren en promedio 100 emergencias diarias y durante la temporada de lluvias atienden simultáneamente 200 puntos de inundaciones.
En este sentido, afirmó que su administración tiene la tarea de mantener a esa institución fortalecida, equipada y preparada para que sigan con su labor y que el cuerpo de bomberos sea cada vez más moderno.
Juan Manuel Pérez Cova, director general del Heroico Cuerpo de Bomberos, informó a la jefa de gobierno que las nuevas unidades tienen la capacidad de combatir incendios de grandes dimensiones, sirven para el transporte de seis elementos y otra de sus funciones es que succionan agua.
Anunció que una de las nuevas unidades será enviada a la estación de bomberos de Milpa Alta, donde todavía hay una capacidad de respuesta por enriquecer y otra dará servicio en Iztacalco.
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Los bomberos, explicó su director, fueron quienes configuraron las nuevas unidades, el armado duró seis meses, “pero valió la pena, porque son vehículos que cumplen con las expectativas operativas para la Ciudad de México”, concluyó.