La desesperación de los habitantes de Iztapalapa por la falta de agua ha llegado al grado de que las personas escarban en la tierra para localizar tuberías y válvulas y tomar el líquido, además de que se han robado pipas, hay toma de garzas y un tambo se llega a cotizar en 200 pesos.
Se han dado casos de que no se entrega el líquido a los vecinos afectados si la jefa delegacional de Iztapalapa, Dione Anguiano, no lo autoriza; ella se ha concentrado en resolver los problemas registrados en Lomas Estrella, y no se ha preocupado por el resto de la jurisdicción, dijeron diputadas federales que ayer presentaron una denuncia.
Ernestina Godoy, Ana María Rodríguez y Ana Leticia Carrera, legisladoras de Morena, dijeron, después de reunirse con Guillermo Orozco, subsecretario de la Secretaría de Gobierno para denunciar los hechos, que Anguiano distribuye las pipas de agua con tintes partidistas.
Antes de ello encabezaron una protesta con algunos vecinos de la demarcación que portaban cartulinas con los siguientes mensajes: “Iztapalapa tiene sed”, “El agua no es una mercancía” y “No a las claves para recibir agua”.
Ana Leticia Carrera afirmó que, según cifras del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex), millón y medio de personas en esa demarcación, que viven en 260 colonias, carecen de agua.
En la sede del Gobierno capitalino, las legisladoras dieron a conocer que la respuesta de las autoridades fue acordar una cita con Ramón Aguirre, director del Sacmex, para que les ofreciera una estrategia de reparto de agua sin tintes partidistas.
Carrera Hernández demandó el apoyo de los gobiernos federal y local para auxiliar a los iztapalapenses, quienes tienen que pagar hasta 200 pesos por un tambo de agua.
Y donde hay, está sucia
Dos vecinos, uno de ellos en la colonia Hipódromo Condesa, dieron a conocer que desde que se reanudó el servicio de agua potable en la zona, luego del terremoto de la semana pasada, empezó a llegar turbia con algunos rastros de tierra.
En otro caso, una familia que vive en la calle de Tuxpan dijo que no ha tenido el servicio desde el día del sismo del 19, a pesar de que han solicitado a la delegación y al gobierno capitalino que atiendan sus reclamos.
A ocho días de dicho movimiento telúrico, de 7.2 grados, la zona de la Roma-Condesa prácticamente se reactivó, los comercios que estaban en buenas condiciones reabrieron sus puertas.
Por lo que, tiendas de abarrotes, restaurantes, cantinas y otros negocios dieron servicio y uno de ellos fue una sastrería ubicada en la calle de Quintana Roo y Villahermosa, donde afirmó que desde el día del sismo se quedó sin agua y que al reanudar la semana pasada notó que venía con tierra.
Otros vecinos, los del edificio de Insurgentes número 400, también reconocieron que si tienen el servicio de agua, aunque está un poco“tierrosita”.
Otros vecinos entrevistados, reportaron que desde la semana pasada paulatinamente se reanudo el servicio de agua potable, por lo que no fue necesario recurrir a las pipas para surtirse.
Finalmente, residentes de calles, como Tapachula, Coahuila, Champotón, y comentaron que tienen agua sin problemas.