Las grietas en casas y suelo que dejó el terremoto del 19 de septiembre en la delegación Tláhuac se pueden constatar a simple vista, pero metros más abajo -en el subsuelo-, escapa de los ojos los daños a las tuberías de agua que ponen en riesgo el abasto en una zona que siempre ha sufrido por este servicio.
La situación es bien conocida por las autoridades del gobierno de la Ciudad de México y han planeado una estrategia para rastrear, abrir reparar y cerrar, para así evitar un importante desabasto en esta temporada de estiaje.
Con una inversión de 214 millones de pesos, el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (Sacmex) planea tener listo para fines de julio la rehabilitación de las redes de agua potable y drenaje de la delegación Tláhuac, lo cual beneficiará a cerca de 91 mil habitantes.
Esa demarcación, junto con la de Xochimilco, fue una de las más afectadas por el sismo del 19 de septiembre del año pasado en esa materia, por lo que se trabaja intensamente para reponer los ductos con tuberías, cuya vida útil es de 30 años, informó el ingeniero Eduardo Méndez, director de Construcción B de dicha dependencia.
Agregó que por estas labores en ningún momento se suspenderá el abasto de agua potable para los habitantes de esa delegación, porque en lo que entra en servicio la nueva tubería se seguirá surtiendo con la anterior.
Durante un recorrido por las colonias Del Mar y La Conchita, así como la unidad habitacional Villa Centroamericana, se pudo observar cómo los trabajos han continuado en más de 12 frentes distintos.
A partir de la zona cero de la delegación Tláhuac, ubicada en las calles Piraña, Aleta, Océano, Gitana y Pingüino, en la colonia Del Mar, el gobierno capitalino ha desarrollado toda una estrategia de rehabilitación que incluye el relleno de grietas a cargo de la Secretaría de Obras y Servicios (Sobse); la colocación de tubos nuevos de drenaje y agua potable; y el reencarpetamiento y reconstrucción de guarniciones y banquetas a cargo de la Agencia de Gestión Urbana (AGU).
Sin embargo, en entrevista con El Sol de México, el funcionario del Sacmex explicó que personal de las tres dependencias se reúnen constantemente para coordinarse en sus trabajos, evitar estorbarse en los mismos y prevenir gasto doble o que ocurra que se reencarpete una calle, sin antes haber colocado la nueva infraestructura hidráulica.
Agregó que el proceso inicia con la liberación de calles, una vez que las dependencias encargadas demolieron los inmuebles catalogados “rojos” (por ser los que sufrieron más daños estructurales) o reforzaron las edificaciones en riesgo, tras de lo cual el Sacmex inicia los trabajos de rehabilitación de la red hidráulica con un trazado primero del lugar donde se excavará para colocar la tubería, luego viene el corte del asfalto y la colocación de los ductos.
Una vez que quedaron colocados, entran en acción las cuadrillas de la AGU, a fin de colocar el nuevo pavimento.
Secuelas
Las secuelas que dejó el sismo a las tuberías en la zona fueron separación de juntas, roturas y fisuras, pérdida de hermeticidad con piezas especiales, deterioro por tránsito de vehículos y socavación debido a fugas no visibles.
En lo que se refiere a las inversiones, a agua potable se asignarán 147.48 millones de pesos, mientras que a drenaje 66.61 millones de pesos, es decir, 214.09 millones de pesos.
Del Mar, Agrícola Metropolitana, La Conchita, Miguel Hidalgo, Selene, Nopalera, y los poblados de San Andrés Mixquic y Santa Catarina son las los sitios donde trabaja el Sacmex meticulosamente para reconstruir lo que el sismo del 19 de septiembre del año pasado y el tiempo se llevó, con cuidado de que tengan las pendientes adecuadas y el trazo correcto para evitar inundaciones.
La nueva tubería, informó, está hecha de polietileno de alta densidad, muy resistente, con medio centímetro de grosor y con una vida útil de tres décadas, siempre y cuando no vuelva a enfrentar un terremoto, como el que azotó la Ciudad de México el pasado 19 de septiembre.
Otro problema que pudiera afectar los ductos nuevos, advirtió, es que talleres y negocios de pintura viertan al drenaje líquidos muy abrasivos, pues eso destruye sus paredes.
Los trabajos de colocación de la nueva red del drenaje de agua potable van muy avanzados en el poblado de Santiago Zapotitlán, especialmente en la calle Cástulo García, donde los trabajadores ya tendieron la tubería y dejaron abiertas las cepas para las tomas de agua domiciliaria. Se prevé que las obras sean en nueve colonias con 45 frentes de trabajo.