En próximos días, la elefanta Ely tendrá tres mil 500 metros cuadrados más para su esparcimiento en el Bosque de Aragón. Se trata de un espacio con árboles, bebederos con flotadores para garantizar que siempre habrá agua y un área libre para que tome sus baños de lodo, así como areneros.
Aunque esto no significa que se resolverán los padecimientos que sufre desde que llegó al zoológico rescatada de un circo, sí contribuirá a que el ejemplar disfrute más su estancia, señalaron especialistas que han visto de cerca el cuidado de la elefanta.
Tal como lo informó El Sol de México en su edición del 4 de febrero de este año, la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México (Sedema) gastó seis millones 54 mil 683.80 pesos, para ampliar el exhibidor naturalísimo del paquidermo. Los trabajos consisten en la construcción de un muro perimetral de aproximadamente 240 metros lineales, elaborado a base de concreto armado de 2.50 de altura; saneamiento del terreno con respeto a la vegetación, entre otros elementos.
Marco Antonio Badillo, encargado del área de elefantes en el zoológico de Aragón y una de las 15 personas, aproximadamente, que tratan al paquidermo, dice que los elefantes suelen tener un temperamento fuerte, pero en el caso de Ely es notable que “está muy contenta”, ya que disfruta la interacción con sus cuidadores y de bañarse en sus loderas.
“Ely está muy contenta aquí en el zoológico de Aragón y con este lugar que se le extendió un poco más va a estar más contenta, va a poder caminar más tiempo, va a estar más ocupada. Tiene la opción de estar aquí, se le va a dejar abierto para pasar de la parte de enfrente a la parte de atrás, le servirá mucho para hacer ejercicio.
“Le gusta mucho la interacción con nosotros que estamos al cuidado de ella todo el día con atenciones, entre operativos, médicos, nutriólogos, etólogos. Aparte le hacemos sus baños y eso en un elefante son actividades importantes y esenciales para que tengan una buena calidad de vida”, señaló en entrevista con El Sol de México.
El cuidador señaló que aún no hay una fecha concreta para abrir la extensión del albergue, ubicado en la parte trasera de su exhibidor, ya que afinan los últimos detalles en la superficie, la cual está rodeada por un muro levantado para evitar cualquier evento que la ponga en riesgo.
“La gente la va a poder ver, pero este espacio también es para que se resguarde y pueda caminar como ella lo decida, se podrá desplazar con más tranquilidad (…). A mí el ver que tenga más espacio, que se pueda desplazar, para mí me tiene contento el poder verla más feliz”, detalló.
Ely tiene una fractura que no consolidó, producto del trato que recibió en un circo antes de ser trasladada al zoológico de Aragón. Marco Antonio Badillo expuso que pese a la afectación la elefanta puede correr, también puede echarse hasta cinco veces al día y levantarse sin problema, lo cual da muestra a sus cuidadores de lo bien que se encuentra.
Los cambios al albergue de Ely forman parte de una serie de recomendaciones realizadas por la Asociación de Zoológicos, Criaderos y Acuarios de México (Azcarm) a finales del año pasado, después del conflicto con asociaciones animalistas que piden el traslado de Ely a un santuario en Brasil, para lo cual tramitaron un amparo cuya resolución aduce que la elefanta está en condiciones óptimas dentro del zoológico.
Ernesto Zazueta, presidente de la Azcarm, mencionó que la elefanta tiene padecimientos que requieren atención permanente y por la misma razón no puede ser trasladada a otro lugar.
“El daño que tiene no se le va a quitar, lo que hacen es mantenerla bien con su mal que ya tiene. Ella no va a salir corriendo ni nada, ella va a estar a gusto y se desplazará a donde ella considere”, expuso.
Zazueta Zazueta adelantó que en mes y medio más la Azcarm regresará al zoo, con veterinarios especialistas, para valorar nuevamente las condiciones y avances en el cuidado del paquidermo.
Actualmente, la Secretaría del Medio Ambiente de la CDMX analiza la posibilidad de que Ely tenga compañía en el zoológico, por eso revisan el tipo de ejemplares que hay en México.