Frente y Morena, la vieja política

El candidato del Partido Humanista, y activista del 85, ve una gran oportunidad en los jóvenes que observan en otras propuestas posturas indefendibles

Cecilia Nava

  · lunes 5 de marzo de 2018

Marco Rascón, precandidato del Partido Humanista a la jefatura de gobierno en la Ciudad de México / Foto: Especial

Aunque se habla que las encuestas apuntalan a dos mujeres de dichos partidos, comentó que las respeta pero para él las estructuras que manejan ya están rígidas, envejecidas y con formas de hacer política desgastadas.

Indicó que la idea del mitin, la gorrita, la camiseta, son imágenes que han ido aislando a los políticos de la ciudadanía, a partir del 30 de marzo dará a conocer la nueva forma en la que se deben hacer campañas, prometió.

¿Las encuestas hablan que la disputa está entre dos mujeres?

Va a estar duro, ojalá que se preparen bien porque esas fuerzas que representan son indefendibles hacia el futuro.

Entre el PRD y Morena durante la elección del 2015-2016 del número de votantes que son siete millones 450 mil, ambos partidos únicamente están gobernando con 16% del electorado, entonces esto me genera ir a buscar a esa población que ya no cree en los políticos de siempre, como los jóvenes.

Es decir que no lo están haciendo bien los de siempre, los discursos de los partidos políticos están generando un conflicto en lugar que la gente tome partido se han retirado.

Esta contienda será muy interesante.

¿Qué pasa con la clase política que gobierna la ciudad?

Se ha ido retrasando de la visión de los ciudadanos, las instituciones son más reacias a los cambios pero se han ido deformando ese tipo de voluntades, una de las peores leyes que existen en la ciudad es la de participación ciudadana, hay que cambiarla se manipula a la opinión de los vecinos se tiene que hacer un esquema diferente. Esta Ley tiene que estar en la propia vocación de los distintos territorios, ya hablaremos cuando lo permitan los tiempos.

¿Cómo ve a la Ciudad de México?

Con cosas muy difíciles, sobre todo si vemos a la ciudad en un futuro; la vulnerabilidad de la ciudad ha crecido mucho, unos por cuestiones de carácter natural como el problema del agua, sustentabilidad, proveeduría de alimentos, el conflicto de la movilidad, todo ese mundo que tiene que ver con los problemas que se han ido acumulando y se pueden agravar si no se atienden de manera profunda y esto ni siquiera tiene que ver con asunto de seis años.

Sino finalmente se tiene que reconstruir las políticas estratégicas (públicas) que vayan más allá de próximos sexenios y para eso se necesita un gobierno que sea convocante e incluyente para una visión concorde con la ciudad y así se tengan que generar estas políticas con todos los órganos de gobierno.

No podemos partir de un listado de ocurrencias, priorizar el interés público sobre el interés privado sin que se pierda el derecho individual pero no puede prevalecer si se impone para el desarrollo urbano para la movilidad incluso la prevención de las causas naturales que traemos atravesadas estamos en la zona sísmica de mayor vulnerabilidad y esto no se resuelve con decretos y con discursos.

Se resuelve precisamente con una cultura de prevención, de protección y de seguridad de lo que se construya.

Mejor conocido como Súperbarrio, por su lucha cívica durante el sismo de 1985, se le preguntó que si lo volverá a ser.

En modo de broma dijo que iba a pedir al Instituto Electoral que en lugar de poner su nombre le pusieran Súperbarrio en la boleta.

No me conocen los jóvenes por mi lucha durante el 85 (tras los sismos) pero me van a conocer en unas cuantas semanas lo harán, el mal se volvió imperfecto con las redes sociales.

La izquierda se quedó anclada de una idea del pasado y terminó copiando el viejo sistema corporativo clientelar que combatimos hace muchos años.

¿Qué espera de la población para el día de las votaciones?

Este 1 de julio hará que la CdMx sea el centro y el eje de lo que está marcando los cambios, hay un tema muy objetivo, la política que representó a la fuerza social democrática que hizo posible el primer gobierno después del PRI hoy está fraccionada y aparte profundamente enfrentada, no hay cultura democrática, su lenguaje son los insultos, es el clientelismo, creo que frente a eso una generación como la mía tiene que salir a acabar trincheras y otra vez entrar a la recuperación de todo eso que se ganó.

¿Hay alternativas para una mejor ciudadanía?

Si hay alternativas, la ciudadanía no puede estar sumergida en la apatía ni en el enfrentamiento vecinal, la democracia más que haya un personaje que nos quiera venir a salvar lo importante es el vecino, compañero de trabajo con los que convivimos ahí es donde está la base de una ciudad distinta ese será su mensaje durante la campaña.

Se tiene que priorizar el interés público sobre el interés privado sin que se pierda el derecho individual, pero no puede prevalecer si se impone para el desarrollo urbano

No me conocen los jóvenes por mi lucha como Súprebarrio pero lo harán en unas cuantas semanas"