El acto de disculpa a los familiares de Lesvy Berlín Rivera Osorio derivó ayer en una crítica lapidaria a peritos y médicos del Instituto de Ciencias Forenses (Incifo) local a quienes la testigo social, Irinea Buendía, tachó de carniceros, lo cual levantó una ola de murmullos de desaprobación entre los aludidos.
En el auditorio Doctor Miguel Gilbon Maitret de esa institución, su titular Felipe Edmundo Takajashi Medina cumplió con el punto décimo segundo de la recomendación emitida por la Comisión de Derechos Humanos local sobre este caso.
Así expresó: A nombre del Instituto de Ciencias Forenses, y de quienes intervinieron en la práctica de la necropsia de Lesvy Berlín Rivera Osorio; mujer mexicana, hija, nieta, estudiante de la Universidad Nacional Autónoma de México y amiga de muchas personas, ofrezco nuestra más sincera y sentida disculpa a su familia, por las violaciones a derechos humanos que cometimos en su agravio.
Ante los padres de la víctima, Araceli Osorio y Lesvy Rivera, el director del Incifo opinó que era necesario asumir la responsabilidad por la falta de debida diligencia reforzada por el peritaje de necropsia realizado, en el que se omitió tratar al cuerpo de la víctima con dignidad y respeto, así como realizar la necropsia con exhaustividad y perspectiva de género.
La madre de Lesvy aceptó las disculpas públicas, pero exigió que la palabra empeñada por el director del LIncifo se cumpliera para que no haya una asesinada más sin justicia.
Vino entonces la intervención de Irinea Buendia, de la organización Madres en Resistencia Luchando por el Acceso a la Justicia, y su crítica a rajatabla al médico forense que se “asume como vil carnicero a descuartizar el cuerpo, sin el más mínimo respeto, ni siquiera con él mismo como persona, sin asumir que algún día pueda ser tratado de la misma forma, sin considerar que tienen hijas, hermanas, esposas, madres”.
Agregó que son profesionales competentes y no necesitan que el Ministerio Público les indique cómo deben hacer su trabajo, “las necropsias no tienen sentido si lo que hacen los médicos forenses constituye un intento de ocultar la verdad de los hechos, en una clara violación del acceso a la justicia”.
Hubo murmullos de desaprobación entre los peritos y al concluir el acto, Iván Escartín, médico titulado y una especialidad médica, salió en defensa del gremio y reprochó: "Estamos de acuerdo en acudir a una disculpa pública, pero me parece que es ofensivo lo que se nos dijo allá dentro, me siento muy ofendido".