La detención de Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, exlíder priísta capitalino, por los delitos de trata de personas en la modalidad de explotación sexual está apegada a la ley y en todo momento se respetaron sus derechos, aseguró Ernestina Godoy, fiscal general de Justicia de la Ciudad de México.

Por la mañana, Lázaro Tapia, abogado del probable responsable, informó que su defendido contaba con un amparo desde el pasado 14 de octubre, el cual impedía su aprehensión.

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Sin embargo, en un mensaje virtual a medios, la fiscal local respondió que la orden de aprehensión se ejecutó, debido a que la trata de personas en su modalidad de explotación sexual es un delito grave y que los recursos legales interpuestos por el priísta para combatirla, no modifican ni suspenden dicho mandamiento judicial.

Recordó que, tras esta captura, hay una revisión minuciosa e integral de todas las actuaciones realizadas por la entonces Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México, cuyas investigaciones en este caso, opinó, fueron deficientes, omisas y lejanas del deber de procurar justicia.

Explicó que, del estudio técnico jurídico del expediente del caso, afloraron la ausencia de actos dirigidos a esclarecer los hechos o bien, actuaciones defectuosas como: declaraciones victimales insuficientes, omisión de actos de investigación, deficiente búsqueda respecto a la red de vínculos realizada por la Policía de Investigación, ausencia de diligencias periciales, así como hubo filtraciones de datos.

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Al reabrir el caso, se aplicó la perspectiva de género y de derechos humanos, por lo que se verificaron los hechos, además de buscar y revelar pública y completamente la verdad.

Finalmente, llamó a otras víctimas a denunciar y tener confianza en la fiscalía a su cargo.