Mientras algunas cámaras de comercios y vendedores ambulantes dicen confiar en la autoridad capitalina para evitar daños en sus negocios, otros piden la participación de más elementos donde hasta el Ejército y la Guardia Nacional resguarden durante la marcha del 2 de octubre, donde se conmemorarán 51 años de la masacre de jóvenes.
Enrique Guerrero Ambríz, director general de la Cámara de Comercio, Servicios, y Turismo (Canacope) de la Ciudad de México, anunció que 9 mil 251 de comercios se verán afectados directamente por la marcha y de estos, el 5% no abrirán las puertas en todo el día.
Los puntos de ventas más dañados se ubican por las vialidades entre Eje Central, Puente de Alvarado, Paseo de la Reforma, Avenida Juárez, 5 de mayo y toda la zona del Zócalo.
Estimó que aproximadamente esperan una pérdida de 46 millones de pesos en ventas no realizadas, ya que algunos abren y a veces los consumidores prefieren no asistir a estas zonas.
Exhortaron al gobierno de la ciudad a no institucionalizar la violencia a partir de actos vandálicos: “Estamos a favor de que no haya represión y respeto a la libre manifestación, pero no estamos a favor del vandalismo disfrazado del derecho a la libre manifestación y menos de la impunidad derivada de estos actos de vandalismo”.
Diana Sánchez Barrios, líder de los vendedores ambulantes del Centro Histórico, declaró que estarán trabajando un rato, pero lo dejarán de hacer conforme la marcha se esté acercando a los espacios de venta.
Informó que los comerciantes y locatarios del centro sobre todo de la calle de Motolinía se ha tomado la decisión de no confrontación con las personas que estén provocando actos vandálicos: “Estaremos al pendiente que el gobierno de la Ciudad de México haga lo que le corresponde y por este momento nuestra postura es darles el beneficio de la duda”.
Expuso que las marchas se convierten en una más de estas estadísticas de la violencia y que era lamentable que como comerciantes en la vía pública sí les aplican toda la fuerza del Estado, contrario a los que han estado realizado desmanes.
La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) de la Ciudad de México, anunció que no están recomendando a los negocios o comercios que deban cerrar durante ese día o que deban prepararse de alguna u otra manera.
“La exigencia sigue siendo que la autoridad cumpla su responsabilidad clave de proteger la libre manifestación, la seguridad de los negocios, trabajadores y transeúntes. La actividad económica no se puede detener, y ahí la responsabilidad enorme de la autoridad por garantizarlo”, manifestaron.
El presidente de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo, José Manuel López Campos, pidió al gobierno capitalino un mayor número de elementos de los diferentes cuerpos policiacos, así como del Ejército y de la Guardia Nacional para evitar que algunos grupos infiltrados entren a la manifestación y provoquen actos violentos.
Campos comentó que la autoridad está a tiempo de detener los actos violentos que los grupos realizan a su paso durante las marchas, pues hasta ahora han dañado bienes materiales, pero es necesario evitar que suban de intensidad y se tengan perjuicios mayores.