Un nuevo problema aqueja a la policía de la Ciudad de México. Se trata del huachicol digital, que según el titular de la dependencia, Jesús Orta, consiste en un esquema en contubernio con las estaciones de servicio.
La dependencia detectó prácticas de robo de combustible digital a vehículos por lo que ordenará una investigación para esclarecer dichas anomalías además de que se reducirá en 30% la dotación de combustible a la flota de la policía, pero no afectará la operación de los servicios que brindan.
A partir de que se detectó el modus operandi del robo de combustible se tomó la decisión de reducir la dotación pues, explicó, al comparar el kilometraje y el rendimiento de las patrullas, "es claro que no se requiere la dotación completa para realizar los recorridos de vigilancia".
“Se están haciendo con menos gasolina, y lo que sobra se lo están robando, no los policías, por cierto”, aclaró el secretario.
“También tenemos alrededor de mil 500 vehículos que prácticamente están en talleres o ya no se usan porque ya tienen antigüedad y no han sido dado de baja, por diversas circunstancias, y siguen reportando consumo de gasolina, mantenimiento automotriz”.
Y añadió: “Habrá una disminución, no va a afectar la operación, simplemente se están haciendo ajustes que históricamente no se han hecho y que han creado una serie de redes de intereses internas y externas”.