Sin ofrecer cifras, la procuradora general de Justicia de la Ciudad de México, Ernestina Godoy Ramos, aseguró ayer que hay varios narcomenudistas detenidos que operaban en los campus de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), con cuyas autoridades, subrayó, se tiene una buena relación.
Al respecto, Jesús Orta Martínez, secretario de Seguridad Ciudadana, recordó que la policía no puede entrar a las instalaciones de la máxima casa de estudios y personal de seguridad les entrega a los detenidos para presentarlos ante el Ministerio Público. Sin embargo, la UNAM sólo explicó que los operativos se han realizado en la periferia del campus central.
Los dos jefes policíacos fueron entrevistados, luego de asistir a la reunión mañanera del gabinete de seguridad con Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno.
La procuradora apuntó que también se trabaja con la UNAM en lo referente al programa Senderos Seguros de todas las instalaciones universitarias y esto se hace desde varios aspectos, como iluminación, camiones especiales para transportar a la comunidad estudiantil, trabajadores y maestros a estaciones del Metro.
Asimismo, presencia policíaca y sobre todo, subrayó, hay una coordinación estrecha con la Rectoría de la UNAM.
En este sentido, el secretario de Seguridad Ciudadana afirmó que la colaboración es con personal de la Secretaría de Seguridad y Protección Civil de la máxima casa de estudios, que la que está a cargo de llevar a cabo las revisiones y operativos de vigilancia.
Explicó que cuando se registra un incidente, como puede ser la venta de drogas al menudeo en las instalaciones universitarias, “nos lo ponen y nosotros hacemos la puesta ante el Ministerio Público. Hay coordinación y comunicación con la UNAM”.
Finalmente, esta colaboración viene de la administración pasada, cuando José Ramón Amieva, exjefe de Gobierno de la Ciudad de México, anunció un programa para proporcionar seguridad a estudiantes de la UNAM y combatir el narcomenudeo en sus instalaciones, tras un ataque de porros a alumnos en la explanada de la Rectoría.
REPUNTA EL CRIMEN
La seguridad en la Ciudad de México, Guanajuato, Jalisco y Quintana Roo, que son estados importantes para la economía nacional, es preocupante para el Semáforo Delictivo por su deterioro creciente, afirmó ayer su titular, Santiago Roel, al presentar el reporte del índice de criminalidad de los tres primeros meses de este año.
Señaló que la capital del país registra un incremento de homicidios del 48%, con respecto al mismo periodo de 2018; y que también pasa de color verde en el semáforo a rojo por delitos de alto impacto.
En el caso de los crímenes, aparece en verde por su tasa 4.3 homicidios por cada mil habitantes y en narcomenudeo alcanza los 15 puntos por cada 100 mil pobladores. Por este delito, señaló que fueron mil 322 casos, empezó en enero con 474, le siguió en febrero 428 y 420 en marzo.