La gran cantidad de habitantes en la Zona Metropolitana del Valle de México y la falta de agua en las cuencas de Lerma y Cutzamala contribuyen a agravar la escasez de líquido, consideró el investigador de la Unidad Iztapalapa de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), Agustín Felipe Breña Puyol.
En el marco del Día Mundial del Agua, el experto destacó que el Valle de México pasará momentos difíciles durante la época de estiaje, la cual, coincidió con las autoridades capitalinas, podría durar aproximadamente tres meses.
“Este escenario prevalecerá hasta mayo o junio cuando comienzan las lluvias abundantes que volverán a recargar los acuíferos de los que se extrae un gran volumen. Hay una situación compleja que nos está diciendo que no hay el líquido vital”, mencionó el académico.
Breña Puyol destacó que la población en el Valle de México, ocupada por más de 20 millones de personas, tendrá esta circunstancia en forma continua, por lo cual consideró que las autoridades deben estudiar la situación del recurso, tanto superficial como subterráneo, para ver su disponibilidad, que empeora durante la presente época.
El académico del Departamento de Ingeniería en Procesos e Hidráulica resaltó que la alcaldía Iztapalapa y el municipio de Ecatepec tienen una continua falta de agua debido a su gran cantidad de residentes, que rebasa el millón y medio, y porque no cuentan con oferta suficiente para cubrir la demanda.
De acuerdo con el investigador de la UAM, el llamado de la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, a la población para no desperdiciar agua es bueno, pero consideró que también debe haber información sobre “por qué hay carencia del agua del Cutzamala y Lerma –que abastece 70 por ciento del caudal– y el volumen de los cuatro o cinco acuíferos ubicados en la zona durante la temporada de estiaje”.
El caudal entregado a la Ciudad de México y al Estado de México se ha reducido en 2.5 metros cúbicos por segundoGermán Martínez Santoyo, director de la Conagua
El 16 de marzo, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que los embalses El Bosque, Valle de Bravo y Villa Victoria, que abastecen al Sistema Cutzamala, están a 47.6 por ciento de su capacidad. La cantidad de agua fue 0.9 por ciento menor a la reportada dos días antes.
Debido a esta situación, la Ciudad de México recibe menos cantidad de agua respecto a años anteriores y el gobierno local impulsa estrategias para garantizar el suministro de agua potable a la población afectada como el traer agua de Zumpango, Estado de México y obras en la Presa Madín.
Además, la autoridad local destacó que la Línea Metropolitana, que hizo el gobierno mexiquense, suministrará agua a esa entidad, así como a la alcaldía Iztapalapa, una de las más afectadas en esta época de sequía.
Vienen las inundaciones
De acuerdo con Conagua, entre mayo o junio terminará la época de estiaje con la entrada de las lluvias, las cuales, consideró Breña Puyol, provocarán inundaciones y otras afectaciones a hogares, como cada año, debido a las condiciones del suelo de la región.
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El investigador de la UAM explicó que a pesar de la red de drenaje de tipo combinado o el Túnel Emisor Oriente, en algunas zonas de la urbe persistirán los problemas de inundaciones o derrumbes por el mal desagüe.
“Esto ocurre por la extracción excesiva del agua subterránea, que provoca que el suelo se compacte y se hunda, lo que en particular se presenta en Xochimilco y el Valle de Chalco, que están sobre un lago plano y cuando llueve no permite un desagüe y debilita los cimientos de casas”, mencionó.
