A casi 50 años de dar servicio, el Sistema de Transporte Colectivo Metro tiene aún muchas historias cotidianas, como gente que se lanza del tren en movimiento, el tan temido "estimados usuarios la marcha de los trenes será lenta, por su comprensión, gracias (tururú)", así como hordas de personas con prisa que se suben como pueden a los vagones, pero el gran gusano naranja es uno de los transportes más accesibles y eficientes, en la medida de lo posible.

Las horas pico, el calor y el aturdimiento son un caldo de cultivo para que los ladrones extraigan sin pena y con gloria carteras, celulares o cualquier cosa, en lo que va de este año, de acuerdo con indicadores de incidencia delictiva en la Ciudad de México emitidos por la Procuraduría General de Justicia, en el metro han sido robados 225 celulares, 1.8 cada día.

Sin embargo, muchas de las víctimas de robo en el transporte, expuso la especialista en defensa personal Karen Soto, es por estar distraídas, por lo que recomendó permanecer alerta respecto de las personas que caminan al lado.

A su vez, sugirió identificar sus rostros y establecer contacto visual, porque los agresores se sienten intimidados cuando consideran que posteriormente se les puede reconocer y abandonan sus intenciones de robo.

Antes de subir a los vagones, es preciso colocar el teléfono celular y otras pertenencias dentro del bolso o mochila y dejarlos al frente para rodearlos con alguno de los brazos que queden libres, para aquellos que gustan escuchar música, sugirió portar sólo un auricular, para así estar atento a lo que suceda alrededor.

De acuerdo con el Diagnóstico sobre la violencia contra las mujeres y las niñas en el transporte público, elaborado en 2017, las mujeres hacen trayectos numerosos y complejos, rutas variadas pero cercanas a sus hogares, acompañadas por hijos y cargadas con bultos, carriolas o mochilas, aunado a que son más vulnerables al acoso sexual y ser molestadas.

El informe, elaborado por el Inmujeres CdMx, ONU Mujeres y el Colegio de México, abundó que 49.9% de las mujeres padeció algún acto violento en espacios públicos. Así, 11.44% de las mujeres ha vivido agresiones físicas en el transporte público.