En la Ciudad de México hay usuarios de Uber y DiDi que usan las plataformas para enviar paquetes fuera de lo común, con tratamiento especial o que no deberían enviarse por este tipo de aplicaciones como botes de talco con la leyenda Talco Para Pies Cristal, cajas de regalo que abandonan en jardineras hasta análisis médicos.
Trabajadores de apps mencionaron a El Sol de México que, en ocasiones, optan por no entregar los paquetes que les parecen sospechosos, pues temen sean artículos ilegales o hasta droga.
Martín, quien decidió ser nombrado de esa forma por seguridad, trabaja como repartidor desde 2016, en ese tiempo las entregas por Uber eran sólo de comida y con pedidos en las alcaldías Cuauhtémoc, Miguel Hidalgo y Benito Juárez. Recordó que hace un año, la app le notificó sobre la modalidad de paquetería, la cual tomó para generar más ingresos.
El repartidor contó que las entregas más comunes son documentos o llaves, pero recientemente le solicitan entregas poco convencionales, con características que le generan incertidumbre sobre su contenido.
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De acuerdo con Martín, su primera experiencia de este tipo de paquetes fue en Naucalpan, Estado de México, pues el solicitante le dio una dirección, donde, en realidad, no sería la entrega.
“En la aplicación decía tal casa y la calle, pero cuando llegué no estaba el chico. Le escribí y hasta que me marcó me dijo: ¡‘no, no es ahí!, estoy en tal esquina’, me fui para allá, eran dos cuadras. Me acerqué y me dio una bolsa gris, pero yo lo vi medio nervioso, como raro, no me agradó, pero a mí no me gusta cancelar los pedidos y menos ya estando con la persona.
“Me lo dio y no estaba tan grande, pero se sentía como un polvo, y aparte me dijo que tenía que dejarlo a la altura de Cuatro Caminos, sobre Periférico. Era una casa, había tres jardineras y me comentó que lo dejara en la jardinera de en medio, que solamente la dejara y después la iban a recoger”, comentó. Él aceptó la entrega, la cual hizo y después se fue del sitio.
El repartidor se percató de que probablemente estaba en riesgo al realizar la entrega, pero asumió el riesgo y, una vez que aventó la bolsa, subió a su moto y se fue rápidamente del lugar. También le han solicitado entregar, de un hotel a otro, recipientes y cajas sin etiquetas que al interior parecen contener pastillas, así como trasladar análisis clínicos, de orina y sangre.
En otra ocasión, un laboratorio pidió el servicio para el traslado de análisis clínicos, de orina y sangre.
“Me los dieron en una bolsa de esas que te dan en el supermercado, desechable, todo bien equis, que no creo que fuera bueno llevarlo así, yo no quise meterlo a mi mochila, porque traigo comida, ¡cómo voy a cargar eso! Traigo una motoneta y ahí los puse, pero me salió la mala fortuna de que se me atravesó un carro y me iba a tirar, jalé el volante y se me cayó todo, la orina, la sangre y lo aplastó un carro”, dijo.
Martín hizo el reporte correspondiente ante la app; pero consideró que es un proceso tardado, porque no es personal, sino por mensaje.
El fundador de Ni un repartidor menos, Saúl Gómez, habló en entrevista sobre los envíos realizados en formas “extrañas”, sin un domicilio específico, sino con referencias de ubicación, es decir, afuera de una tienda, de una heladería o de un hotel.
Destacó que, comúnmente, los remitentes insisten a los repartidores que tengan mucho cuidado con el paquete y que lo entreguen a cualquier costo.
Saúl Gómez detalló que hay tres formas de entrega recurrentes: en cajas de regalo o bolsas pequeñas; en una prenda de ropa o cajas de supuestos zapatos (la persona que recibe la prenda saca lo que hay dentro y regala al conductor la ropa); envases de talco que dicen “cristal”.
De acuerdo con la organización, donde más se dan estos paquetes son Santo Domingo Coyoacán, zonas de Iztapalapa e Iztacalco; Santa Cruz Atoyac en la zona de los City Towers; Escandón, Roma, Condesa, Buenavista, Guerrero, Tlatelolco y la zona cercana a Indios Verdes.
“Hay otros tipos de entregas que son un poco más complicadas: hay que entregar maletines llenos de dinero, hay que entregar oro, hay que entregar análisis clínicos, porque, a final de cuentas, la plataforma no pone restricción para los envíos o no dice qué es la restricción y de ahí los delincuentes pueden sacar alguna ventaja”, dijo.
De acuerdo a la información publicada en la página de Uber, UberFlash está disponible para enviar artículos no mayores a 20 kilogramos que quepan cómodamente en la cajuela o asiento trasero de un vehículo compacto.
Los objetos que están prohibidos en envíos, de manera enunciativa pero no limitativa, son alcohol, tabaco, armas, bienes ilegales/robados, estupefacientes, barbitúricos, materiales peligrosos, animales, especies reguladas, dinero; gift cards; objetos de alto valor; joyería, medicamentos de receta, entre otras cosas no permitidas por ley.
La empresa DiDi señaló que la privacidad de sus usuarios es una prioridad, razón por la que no profundizan en el contenido de los paquetes entregados.
No obstante, aclaró que DiDi Entrega incluye en sus Términos y Condiciones una lista de artículos que no se pueden enviar por esta vía, como objetos que puedan causar daño a los repartidores o conductores, muestras de laboratorio, objetos prohibidos por la ley, entre otros artículos.
La empresa informó que los socios conductores de la aplicación en cualquiera de sus productos cuentan con funciones de seguridad que pueden activar en cualquier situación que les haga sentir incómodos o inseguros, como son grabación de audio encriptada, el botón para conectarse directamente al 911 en caso de emergencia y la línea telefónica de soporte que opera 24/7. Los socios conductores también pueden cancelar y reportar un viaje por motivos de seguridad.
A solicitud de esta casa editorial, Uber expuso que cada reporte es tratado por un equipo especializado y según la gravedad, realiza una investigación exhaustiva.
“Los equipos de vinculación policial en Uber mantienen una estrecha colaboración con autoridades de seguridad en todo el país a través de herramientas exclusivas y también respaldada mediante tecnología, incluyendo el registro GPS de todos los viajes. Si alguien quiere hacer mal uso de la aplicación, Uber no dudará en compartir estos respaldos con las autoridades en el marco de una investigación”, detalló la compañía.
Por su parte, la empresa DiDi señaló que la privacidad de sus usuarios es una prioridad, razón por la que no profundizan en el contenido de los paquetes entregados.
No obstante, aclaró que DiDi Entrega incluye en sus Términos y Condiciones una lista de artículos que no se pueden enviar por esta vía, como objetos que puedan causar daño a los repartidores o conductores, muestras de laboratorio, objetos prohibidos por la ley, entre otros artículos.
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"Los repartidores y conductores que transportan artículos mediante la modalidad de DiDi Entrega tienen total libertad para aceptar o rechazar una solicitud antes de iniciar el envío", expuso la compañía a solicitud de esta casa editorial.
En ese sentido, en caso de que consideren que se trata de algún artículo sospechoso, los repartidores pueden cancelar sin ningún tipo de afectación en su cuenta. Asimismo, los repartidores y conductores pueden realizar su denuncia con las autoridades locales competentes.