Hasta con cinco millones de pesos se podría multar a la empresa que derribó 14 árboles para las obras de la línea 4 del Mexibús, mismas que se hacían a valores entendidos de compromisos entre el gobierno del Estado de México y las constructoras implicadas.
Así lo señaló a El Sol de México, David Armando Alcántara, coordinador de Inspección, Verificación y Normatividad de la dirección de Medio Ambiente y Ecología municipal, quien destacó que la empresa constructora deberá presentar ante la dirección de medio ambiente municipal sus trámites de construcción aunque independientemente ya se está preparando la querella ante la procuraduría del medio ambiente estatal porque lo que cometieron es un delito.
“Se cortaron ilegalmente 14 árboles de más de nueve metros de alto y si habrá una sanción que puede llegar a los cinco millones de pesos, independiente de lo que dicte procuraduría del medio ambiente que son muy altas, será muy parecida la situación a la que se dio en la ciudad en el caso Mitikah”, señaló el funcionario.
Indicó que la obra está a cargo de la junta de caminos del Estado de México y ellos subcontrataron empresas que a su vez contrataron a otras empresas para hacer trabajos específicos. Sin embargo la norma técnica ambiental estatal dice que a pesar de que sea un proyecto público o privado se debe de contar con requisitos como la adecuación de diseño de obra donde debe justificar cuantos arboles pueden convivir y en caso de que no se salven exlpicar las razones. “Aquí lo hicieron a su gusto, primero derribaron y luego preguntaron”.
Abundó que el propio Mexibús fue una copia al vapor del Metrobús en la Ciudad de México que "se hizo muy sin pies ni cabeza en el Estado de México".
El funcionario agregó que la Línea 4 seguirá suspendida en el tramo del Albarradón, que también sufrió fuertes daños y que incluso, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) tiene responsabilidad compartida en la tala de árboles porque donde estaba el muro coexistía un árbol derribado a través de una empresa que subcontrató el INAH.
“El abogado de la junta de caminos del Estado de México me decía: es tu obligación notificarme que debo tramitar un documento (...) nunca justificaron de manera técnica por qué los arboles no pueden convivir con la obra. Deben resarcir, dar arboles pequeños, unos 25 al vivero municipal para hacer programas de reforestación”, dijo Alcántara.