Volcán Popocatépetl, el coloso de fuego que despertó hace 24 años

Don Goyo, como le dicen los pobladores, lanzó el 21 de diciembre de 1994 su primera emisión de ceniza tras 67 años sin actividad

Gerardo Campos | El Sol de México

  · jueves 28 de marzo de 2019

El volcán Popocatépetl | Foto: Notimex

Era 21 de diciembre de 1994 y el coloso de fuego, que reposaba en silencio desde 1927, despertó. El volcán Popocatépetl lanzó su primera emisión de ceniza en 67 años y las alarmas se encendieron.

Desde ese día no ha vuelto a descansar, unos días amanece más activo que otros, pero fue en el 2000 cuando levantó las alertas, la gente salió de sus casas para resguardarse. Don Goyo lanzó ceniza y material incandescente a varios kilómetros, además de arrojar lava.

En estos años ha tenido etapas efusivas y explosivas asociadas con el crecimiento y destrucción de domos de lava en el interior del cráter, se explica en documentos del Centro Nacional de Prevención de Desastres (Cenapred).

Sus cenizas han alcanzado las ciudades de Puebla y de México y poblaciones incluso en Querétaro y Veracruz. Los fragmentos incandescentes lanzados por sus explosiones han llegado a casi cinco km de distancia del cráter y a unos 3.5 km de las poblaciones más cercanas al volcán.

El 12 de diciembre de 2000, Don Goyo lanzó hasta 200 por día, muchas de ellas con emisiones de ceniza que alcanzaron entre cinco y seis kilómetros de altura.

“Por la noche era posible observar el resplandor del cráter y la emisión de fragmentos incandescentes. Una actividad similar, pero con menos exhalaciones aunque de mayor duración, se observó del 13 al 15, lo que produjo lluvias de ceniza en poblados cercanos”, se narra en el documento Historia del Volcán Popocatépetl.

El 15, cerca de 41 mil personas abandonaron el área y el 24 lanzó fragmentos incandescentes a 2.5 km, produciendo una columna de ceniza de aproximadamente cinco kilómetros sobre el cráter.

El 13 de enero se observó que el domo había quedado destruido. Confiando en haber establecido la naturaleza y tamaño del episodio y los límites esperados de actividad futura, se recomendó la reducción del radio de seguridad a 12 km, por lo que la gente pudo regresar a sus casas.

Pero hasta hoy, Don Goyo sigue dando señales de advertencia de que sigue activo, hay días que lanza más ceniza o fumarolas de varios kilómetros, como un recordatorio de que debemos estar prevenidos.