- No se permite que la población esté informada, señalaroninvestigadores
Patricia Torres / El Sol de México
Ciudad de México.- Asesinatos, desapariciones, lesiones yamenazas contra periodistas representan un factor dedescomposición social, al no permitir que la sociedad estéinformada y comunicada, señalan investigadores del InstitutoBelisario Domínguez (IBD) del Senado de la República, que ademásrefieren que del año 2000 a junio de 2015, se registraron 103periodistas asesinados en el país.
En el cuaderno de investigación “Violencia hacia losperiodistas y libertad de expresión” refieren que los delitoscometidos contra periodistas para coartar su libertad deexpresión, también representan una amenaza constante para elEstado mexicano.
El Poder Legislativo, añade, aún tiene pendientes por resolverpara evitar la violencia contra periodistas y proteger la libertadde expresión en México.
Durante la LXIII Legislatura del Congreso de la Unión, se hanpresentado dos iniciativas para el tema de prevención de violenciahacia periodistas, las cuales están pendientes de revisión ydiscusión; y en la LXII Legislatura se promovieron otros 15proyectos en este rubro (ocho están pendientes de revisión; tresobtuvieron dictamen negativo en Cámara de origen; dos fuerondesechadas y dos aprobadas).
A pesar del trabajo realizado, las diferentes estadísticasmuestran a México como un país donde el ejercicio de losperiodistas es peligroso, por situaciones como asesinatos,desapariciones, lesiones y amenazas; y no solo se limita aindividuos, sino que también a corporaciones e instituciones enmateria informativa.
México recibió el puntaje más bajo en más de una década (63puntos de 100) en el informe “La libertad de prensa 2015”,publicado por Freedom House, por lo que se coloca en el lugar 139de 199 países, como un país con libertad de ejercicio de prensaparcial.
La organización refirió que el principal factor que merma lalibertad de prensa ha sido la aprobación y uso de leyesrestrictivas contra los medios de comunicación, a menudo porrazones de seguridad nacional, así como los límites a lacapacidad de los periodistas, nacionales y extranjeros, a informarlibremente dentro de un país determinado.
La Dirección General de Análisis Legislativo detalla que, deacuerdo a “El Barómetro de la Libertad de Prensa”, del año2004 al primer trimestre de 2016 se han confirmado 53 periodistasasesinados en el país.
Por su parte, la Fiscalía Especial para la Atención de Delitoscometidos contra la Libertad de Expresión (Feadle), registró 103periodistas asesinados en México, del año 2000 a junio de 2015.Mientras que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH)reporta 89 defunciones en ese mismo lapso. Según la ProcuraduríaGeneral de la República (PGR), de 2006 a febrero de 2016 selevantaron 851 averiguaciones previas en la Feadle por delitoscometidos contra periodistas; 31 indagatorias vinculadas conhomicidio de comunicadores, del 5 de julio de 2010 al 31 de marzode 2016.
En cuanto a los inicios y determinaciones de averiguacionesprevias instruidas por delitos cometidos en agravio de periodistasy medios de comunicación, la Fiscalía reportó que, al 31 demarzo de 2016, existían 234 documentos en trámite -apenas 14 endespacho y 220 pendientes-.
De ahí que la impunidad en estos casos se aproxime al 90 porciento, como lo refirió PEN Internacional en su “Declaraciónsobre Libertad de Expresión en México”, de febrero del añopasado.
El estudio del IBD destaca que 20 de las 32 entidadesfederativas registraron al menos el homicidio de un informador enlos últimos 15 años; de acuerdo a la Feadle, los estados conmayor número de periodistas asesinados en este periodo fueron:Chihuahua (16), Veracruz (16), Tamaulipas (13), Guerrero (11) ySinaloa (siete).
En cuanto a periodistas desaparecidos, la Fiscalía Especialpara la Atención de Delitos cometidos contra la Libertad deExpresión reportó 25, de 2005 a marzo de 2016; mientras que laCNDH fijó la cifra en 23.