Manrique Gandaria / El Sol de México
Ciudad de México.- El penal del Altiplano en el Estado deMéxico cuenta con siete círculos de seguridad, entre ellos eldenominado, “Hombre muerto”, el cual es considerada por loscustodios como una zona prohibida, en donde, si un reo lograllegar, se extinguen sus “derechos”, por lo que los custodiostienen la autorización para tirar a matar sin perjuicio deincurrir en la comisión de un delito.
Este sistema también se lleva a cabo en los penales de PuenteGrande, Jalisco, el de Matamoros, Tamaulipas, y el Salto,Jalisco.
En estas cárceles, de acuerdo a la Comisión Nacional deSeguridad (CNS) existen sistemas y equipos electromecánicos yelectrónicos como: circuito cerrado de televisión, control deaccesos, alarmas, detectores de metal, drogas y explosivos,radiocomunicación, voz y datos, sensores de presencia, ytelefonía entre otros, para apoyar a los elementos deseguridad.
El año pasado, el Gobierno federal destino, 16 mil 991 millonesde pesos para la administración de los 17 centros penitenciariosdependientes de la administración nacional. En estos centrospenitenciarios, están encerrados poco más de 22 mil 731 reos, yotros 26 mil 140 reos del fuero federal están en prisionesestatales, cuando la realidad es que estos últimos deberían estaren cárceles de máxima seguridad, pero no es así por razones defalta de espacios.
No obstante, en el penal del Altiplano, donde se encuentraJoaquín Guzmán Loera, existe una población de mil 74 internos,lo que significa una sobrepoblación de 238 personas, toda vez quesu capacidad es para 836 reos. El Altiplano, barrerainfranqueable
Ubicado a 25 kilómetros de la ciudad de Toluca, el penal delAltiplano cuenta con una extensión de 260 mil metros cuadrados delos cuales 27 mil 900 componen las instalaciones de la prisión yel resto se utiliza como área de seguridad, y para lasinstalaciones diversas como son el centro de apoyo a la seguridad yguarda, rondín perimetral, sala de espera y estacionamientos.
En este penal, donde alguna vez estuvo encerrado Raúl Salinasde Gortari, hermano del expresidente Carlos Salinas de Gortari,autoridades penitenciarias ha establecido siete círculos deseguridad, y uno en especial, especifica que si un interno llegahasta esta zona, “es hombre muerto” toda vez que estasituación faculta a los custodios a disparar a matar.
De acuerdo a autoridades penitenciaras, el primer perímetro deseguridad consiste en la instalación física del módulo donde seencuentran los recluidos, el segundo, es la barda de la zona depatios, un tercer son los sensores infrarrojos y de movimientos enzona prohibida.
Refieren que el cuarto círculo es el sistema de cámaras devigilancia con recepción y control desde fuera de lasinstalaciones, por autoridades independientes del penal; y es elquinto al que denominan la zona de "hombre muerto".
El sexto es la barda perimetral con torres de control y guardiasarmados, con la facultad de disparar a quien intente escapar y elséptimo y último, es una zona de seguridad con aduanas de controla cargo de la Policía Federal.
Se especifica que estos círculos de seguridad tienen sistemasindependientes y a cargo de distintas áreas, cuya información escompartimentada, con estrictos tramos de control.
Autoridades penitenciarias señalan que a los custodios se lesrecalca que en los penales a su cargo, se concentran los presos conmayor poder económico como jefes de los cárteles de las drogas;así como los más violentos y de mayores capacidades físicas, deahí la importancia de los rigurosos sistemas de seguridad.
Durante la actual administración el Gobierno federal se haencargado de modernizar los penales federales del país, Tan soloel año pasado, se destinaron 16 mil 991 millones de pesos a laadministración del sistema federal penitenciario; lo querepresenta tres veces más de lo invertido en la GendarmeríaNacional y 16 veces más que el presupuesto de subsidios para laimplementación de la Reforma al Sistema de Justicia Penal.
Tan solo en la última década, la población penitenciaravaronil en México aumento en 40 por ciento y en 100 por ciento lafemenil, lo que coloca a México en el sexto lugar de países concárceles más saturadas del mundo. Cero armas, teléfonos,celulares y televisiones en prisiones de alta seguridad
El Reglamento de los Centros Federales de Readaptación Socialseñala que bajo ninguna circunstancia los presos podrán tenerarmas de cualquier tipo, teléfonos celulares o satelitales, radioso equipos receptores-transmisores y cualquier otro instrumento deintercomunicación o sistema de comunicación electrónica, equipode cómputo u otros dispositivos, que por sí o con algúnaccesorio puedan usarse para comunicación no autorizada.
Excepto, señala el reglamento, cuando el Comité TécnicoInterdisciplinario el cual funciona como órgano de consulta,asesoría y auxilio del director general, decida la autorización osuspensión de visitas, autorización de "estímulos " para elinterno, imposición de correcciones disciplinarias, clasificaciónde cada interno en el dormitorio, módulo, nivel, sección,estancia y cama.
Estas reglas fueron duramente cuestionadas tras la fuga deGuzmán Loera el 11 de julio pasado, ya que en el video quepresentaron las autoridades al momento del escape, se observa queel capo tenía en su celda una televisión LCD y un Ipad, noobstante que ese tipo de aparatos no aparecen en la lista deobjetos que los reos pueden tener en su celda.
El Reglamento también señala que los presos no podránelaborar, introducir, consumir, poseer o comerciar bebidasalcohólicas, estupefacientes, psicotrópicos, sustancias tóxicasy, en general, todo aquello cuyo uso pueda alterar la seguridad delcentro federal.
Además también está prohibida toda relación del personal delcentro federal con los internos, sus defensores, representantecomún, personas de confianza o quienes estén acreditados comovisita en cualquiera de sus modalidades, fuera del ejercicio de susfunciones. Plataforma México y la polémica de su efectividad
El sistema de Plataforma México, impulsado durante el sexeniodel expresidente Felipe Calderón para combatir al crimenorganizado, tenía como principal misión, buscar un intercambio deinformación entre los tres órdenes de gobierno: el federal, elestatal y los municipios para hacer más rápida la informacióncriminal y de registros.
No obstante, la fuga del Chapó Guzmán el 11 de julio pasadopuso en entredicho la operación de la Plataforma México, ya quedebía estar conectada al sistema penitenciario y alertar sobre lafuga del narcotraficante, lo cual no sucedió.
Por ello, Ramón Eduardo Pequeño, jefe de la División deInteligencia de la Policía Federal y responsable del monitoreo dePlataforma México, fue cesado de su cargo por la fuga del líderdel “Cártel de Sinaloa”, ya que se especula que las cámarasdel Penal del Altiplano, donde estaba recluido “El Chapo”, noestaban conectadas a Plataforma México, sin que se haya comprobadotal dicho.