El juez federal de control del Reclusorio Norte, Gerardo MorenoGarcía, vinculó a proceso al ex gobernador de Veracruz, JavierDuarte de Ochoa, por delincuencia organizada y operaciones conrecursos de procedencia ilícita al considerar que es probableresponsable de liderar una organización delictiva con operacionesen la Ciudad de México, Campeche y Veracruz con el fin de desviarrecursos del erario para la compra de inmuebles, joyas, autos ydepartamentos.
En una maratónica audiencia de más de 11 horas, la defensa deDuarte de Ochoa acusó a la PGR de presentar pruebas alteradas enla carpeta de investigación; “hay una ausencia absoluta de datosde prueba, no hay elementos de que Duarte haya disfrutado deldinero, hectáreas y bienes que se le imputan y pareciera queestamos en el anterior sistema inquisitorio”, dijo el abogadoMarco Antonio del Toro, encargado de su defensa.
Por la PGR, fueron seis los fiscales que detallaron la ruta delos más de mil millones de pesos que presuntamente desvió Duartedurante su administración. Fue el titular de la SubprocuraduríaEspecializada, en Investigaciones en Delincuencia Organizada,(SEIDO) de la PGR, Alonso Israel Lira, quien detalló paso apaso la forma en que Duarte de Ochoa, junto con nueve personasmás, triangularon recursos de Veracruz a diversas cuentas através de la creación de empresas fantasmas, trasferenciaelectrónica, compra de bienes inmuebles, joyas, autos, yates terrenos y demás, todo ello a sabiendas que eran dinero que era delos veracruzanos.
“Sin duda señor juez, este es un caso delicado, pero de nodictar el auto de vinculación señor juez, se estaría mandando unmensaje de que un exgobernador con el simple hecho de que no tengabienes a su nombre, puede quedar exento de la justicia”,puntualizó el ministerio público para forzar al juez a dictar elauto de vinculación a Javier Duarte.
Otra ruta del dinero que detalló el subprocurador, fueron 201millones de pesos que salieron de las arcas del gobierno deVeracruz a través de 18 empresas fondeadas y 30 y MedicaHealthys, y que fueron a parar al consorcio Bardes S. A. de C.V.una de las dos principales empresas en las que se apoyaba duarte ysus presuntos cómplices.
Otro esquema, fue a través de la Secretaría de Salud delEstado, donde la PGR detectó que salieron 500 millones de pesoshacia Farmacias de Genéricos en 2011, -empresa también creadapor Duarte- y 84.6 millones de pesos a la empresa Anabis. Pero alfinal, el total de los recursos van a parar al consorcio Bardes S.A. de C.V.
También se menciona a la empresa Soaris Technology, a quien sele habrían inyectado 38.5 millones de pesos del gobierno deVeracruz, y ésta a su vez envió 6 millones de pesos a la empresaSakmet, y a Beptha 3.9 millones de pesos. Al final 28 millones depesos son para Terra Inmobiliaria.
Javier Duarte de Ochoa quedará internado en el ReclusorioNorte, luego de que juez considerara que la solicitud delMinisterio Público para trasladarlo a un penal federal no fueclara.
La próxima audiencia será el 22 de enero de 2018, fechalímite para concluir las investigaciones.
Largas horas, aburrido yharto
El exgobernador de Veracruz estuvo sentado por más de 11 horasen la sala de juicios del Reclusorio Norte escuchando lasimputaciones que la PGR le hizo por lavado de dinero y delincuenciaorganizada.
A las 9:15 am el ex gobernador fue trasladado (una cuadra) delreclusorio a la zona de juzgados federales en medio un fuertedispositivo que estuvo a cargo de la Policía Federal.
Al inicio de la audiencia el ex mandatario se veía tranquilo ysonriente con sus abogados y portando una chamarra y pantalóngris, colores del uniforme de los reclusos.
A medida que transcurrían las horas la cara de Javier Duarte sefue transformando primero en aburrimiento, después endesesperación y finalmente en fastidio.
Visiblemente nervioso, entrelazaba sus manos mientras losfiscales de la PGR leían el grueso del expediente queconsignaron.
Después de un receso de 15 minutos la sala de audiencia sevolvió a llenar y mientras Marco Antonio Del toro defendía aDuarte, éste se entretenía doblando u desdoblando en variasocasiones una hoja de papel, actividad que al poco rato le aburrióy la dejó.
El único momento que Duarte pareció interesado en lo que sedecía fue cuando el fiscal de la PGR detalló los regalos quemandaba comprar para su esposa Karime Macías Tubilla; entoncesDuarte se sobresaltó abrió los ojos y negó con la cabeza loshechos.
Durante el segundo receso, Duarte de Ochoa no fue sacado de lasala de audiencia por lo que quedó solo más de una horacustodiado por un policía federal.
Al retomar la sesión, su abogado le dio una palmadita en laespalda y dio su discurso final antes de que el juez tomara ladecisión.
Tras conocer que estaba vinculado a proceso Duarte de Ochoaagachó la cabeza y se rascó, miró a sus cinco abogados quienesde igual manera, incrédulos, escucharon la resolución.