En estos momentos, el presidente Andrés Manuel López Obrador se reúne con empresarios de Constellation Brands.
Tras la la cancelación de la cervecera en Mexicali, los directivos que llegaron a Palacio Nacional evitaron dar declaraciones sobre el encuentro.
Hace unos días, la empresa manifestó su disposición a dialogar con López Obrador y su gabinete para decidir el futuro de la planta.
En un comunicado, Constellation Brands dijo que que está dispuesta a trabajar en un plan de acción que considere los retos actuales y futuros que enfrenta México en materia económica y social.
La gente no quiere a la cervecera
Tras la consulta popular realizada para decidir si se construiría o no la cervecera, el presidente dijo el sábado pasado que se cumplirá con el resultado que determinó poner fin a la construcción de la planta cervecera de Constellation Brands en Mexicali, Baja California.
"Fueron los ciudadanos de Mexicali, es un mandato, se va a cumplir, así como a unos les pareció, a otros no les gustó, a México le gustó lo que hizo Mexicali, vamos a seguir apoyando a Baja California".
Asimismo el mandatario, afirmó que las personas son las que tendrían la última palabra y que su gobierno no le daría la espalda a su decisión.
"Aquí se decidió que la gente tendría la última palabra para la operación de la cervecera, no hay que tenerle miedo al pueblo. Se extrañaron con la consulta, pensaron que éramos iguales, que seguimos haciendo enjuagues en la cúpula, aplicando la anti democracia, con influyentismo, dando la espalda al pueblo, no somos lo mismo".
Por su parte, Jaime Bonilla, gobernador de Baja California, reconoció que la cancelación de este proyecto afectaría la economía y generación de empleos en el estado.
Sin embargo, dijo respetar la decisión que tomó la Federación y consideró que se debe establecer un plan B para aminorar los daños que la salida de inversión pudiera generar en el estado.
Acusaciones
Además el gobierno acusa que la empresa que utilizará la poca agua existente en la zona, mientras que la empresa asegura que cuenta con todos lo permisos y estudios independientes, realizados por el Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA) y El Colegio de la Frontera Norte (Colef).
De igual forma la empresa señala que sólo utilizaría el 0.2% de los recursos hídricos de la localidad y que cuenta con mecanismos para tratar y devolver el agua utilizada, para uso agrícola.
Con información de Sarahi Uribe