La Cámara de Diputados aprobó con 469 votos a favor la reforma en materia de vivienda del expresidente Andrés Manuel López Obrador, que permite al Instituto del Fondo Nacional de la Vivienda para los Trabajadores (Infonavit) comprar suelo, construir vivienda y rentarla a trabajadores.
Con la reforma a los artículos 123 de la Constitución, el Fondo constituido con aportaciones patronales que es administrado por el Infonavit, y que permite a los trabajadores acceder a créditos para adquirir vivienda, será utilizado para construir complejos habitacionales.
“El fondo establecerá un sistema de vivienda con orientación social para las personas trabajadoras derechohabientes que permita a las personas trabajadoras obtener crédito barato y suficiente para su adquisición o mejora; también podrá adquirir suelo y construir vivienda, en los términos que fije la ley”, se lee en el párrafo añadido al artículo 123 de la Constitución.
En la discusión en lo particular, los legisladores aprobaron dos reservas: una del diputado Carlos Ulloa para establecer que el Infonavit también podrá comprar suelo para construir vivienda; y otra del diputado Alejandro Carvajal para quitar la posibilidad de que los trabajadores adquieran la vivienda después de 10 años de rentar, como establecía la iniciativa de López Obrador y dejándolo en una ley secundaria.
La reforma establece que se dará preferencia de acceso a la vivienda en arrendamiento social a las personas trabajadoras que hayan aportado continuamente al fondo y no cuenten con vivienda propia y que la ley preverá mecanismos para evitar discrecionalidad o injerencias arbitrarias que limiten el acceso a este derecho.
Durante la discusión, la diputada Lilia Aguilar, del Partido del Trabajo, afirmó que la reforma revierte los cambios realizados por el expresidente Carlos Salinas de Gortari, que quitó al Infonavit la facultad de construir.
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“Estamos planteando que el Infonavit vuelva a tener la atribución de construir, una atribución que le quitó el prócer priista Carlos Salinas de Gortari. Que, de esa manera, garantizaba la entrada de capital privado y le quitaba el carácter social al Infonavit. De esa manera, además con la reforma agraria, Carlos Salinas de Gortari garantizó que el control de la vivienda se mercantilizara y que fuera un objeto”, dijo.
La oposición expresó su apoyo a la reforma, pues coincidieron en que beneficiará a millones de trabajadores, sin embargo, expresaron dudas en torno a la viabilidad de que el Infonavit administre el suelo y construya.
El diputado Manuel Pérez Díaz, del PAN, advirtió que está en riesgo el dinero de los trabajadores, pues dijo que ya se demostró el fracaso del Infonavit como constructora, hecho que limitó su misión a sólo otorgar créditos. El legislador pidió que se mantenga al Infonavit sólo como una institución que otorgue créditos.
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“Regresar al Infonavit constructor, que ya fracasó, mantiene preocupados a los trabajadores y a las trabajadoras de nuestro país, porque van a ver restringido su acceso a la vivienda (...) Una mejor opción es que el gobierno busque ahorros e invierta en otras instituciones de fomento a la vivienda y construya pero que al Infonavit lo mantenga en el esquema de ser una institución crediticia y no arriegue los más de 600 mil millones de pesos construyendo casas”, acusó.
La reforma fue enviada al Senado de la República para su discusión y en su caso aprobación.
