El gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, aseguró que tiene pruebas de que hubo infiltrados enviados desde la Ciudad de México en la protesta por la muerte de Giovanni López y adelantó que se las mostrará al presidente Andrés Manuel López Obrador, tal como lo pidió el mandatario en conferencia matutina.
"Quien acusa debe probar”, declaró el Presidente.
El mandatario estatal dijo que "hay muchas evidencias de cómo se ha construido (la infiltración), simple y sencillamente saber quién pagó los millones de pesos en las pautas de las redes sociales para construir esta historia basada en la desinformación y la mentira”.
La noche del jueves, Alfaro Ramírez acusó que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador está detrás de los enfrentamientos desatados en la marcha para exigir justicia a Giovanni y dijo que hay "intereses muy precisos y muy puntuales construidos desde la Ciudad de México".
"Le pido al presidente dela República que le diga a su gente y a su partido que ojalá estén midiendo lo que están haciendo, el daño que le están generando al país, con este ambiente de confrontación, porque son ellos, justamente, lo han generado todo esto que estamos viviendo"
Durante el transcurso de esta mañana, mientras el Presidente realizaba su habitual conferencia de prensa, el gobernador de Jalisco volvió a decir que esos agitadores fueron enviados desde el Gobierno Federal, pero matizó el panorama y dijo que López Obrador es una persona inteligente y que es su gente de abajo la que no lo ayuda y busca pleitos en otras entidades.
“Lo que yo le digo al presidente de México es que yo sigo creyendo que es una gente de bien, que él no está dando estas instrucciones, pero también le digo con claridad que su gente cercana, que gente de su gobierno y su partido le apuesta a la violencia como una ruta para seguir cuidando sus intereses y sus agendas personales, le digo que él como jefe de Estado está obligado moralmente a atender una petición puntual, respetuosa que hacemos desde el Gobierno de Jalisco”.
Agregó que las imágenes que se transmitieron en medios y redes sociales muestran lo que dice de los infiltrados y recordó que no se había dado una manifestación de ese tipo y con esos niveles de violencia los cuales serán investigados a fondo.
AMLO SE DESLINDA DE ACUSACIONES
Por su parte, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que no está detrás de los enfrentamientos desatados por las protestas donde exigen justicia por Giovanni López, que murió a manos de policías el pasado 4 de mayo.
Por lo que pidió al gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, presentar pruebas de sus acusaciones y que no se retracte de lo declarado. "Quien acusa debe probar”.
Además, el primer mandatario señaló que pese a las diferencias que tiene con el gobernador, no busca perjudicarlo.
"Tengo diferencias con el gobernador de Jalisco (Enrique Alfaro), diferencias políticas, ideológicas, pero actúo con responsabilidad y no me inmiscuyo, no participo en cuestiones partidistas, no soy jefe de grupo, ni de partido; represento al Estado mexicano, no tengo ningún propósito de afectar a autoridades locales".
Asimismo, López Obrador lamentó los hechos reiterando su posición del no uso de la fuerza, “nada por la fuerza decía el presidente Juárez, todo por la razón y el derecho”.
“Para que haya pleito se necesitan dos. No queremos pelearnos. Cada quien debe asumir su responsabilidad y somos respetuosos de las autoridades municipales y de la soberanía que tienen los gobiernos de los estados. No tenemos interés de pelearnos con ningún gobernador”.