La Fiscalía General de la República ejecutó dos órdenes más en contra de Rafael Antonio Amezcua Olvera, expropietario de Sociedad Financiera Popular, Ficrea, por su probable responsabilidad en el delito de operación con recursos de procedencia ilícita, por un monto de más de 230 millones de pesos
Cabe mencionar que hasta ahora no se ha cumplimentado la orden de aprehensión contra este personaje, por el delito de fraude por más de 7 mil millones de pesos, producto del fraude contra miles de ahorradores, que confiaron esta Sociedad Financiera Popular.
Dichas órdenes de captura, fueron liberadas por jueces adscritos a los reclusorios Norte y Sur de la Ciudad de México, tras la audiencia relacionada con el caso por el presunto delito de lavado de dinero por 230 millones de pesos, en manos del juez Séptimo de Distrito de Procesos Penales Federales.
Olvera Amezcua llegó a México el jueves pasado, tras su deportación de Estado Unidos por el Puente de Lincoln-Juárez, que une a las ciudades de Laredo, Texas y Nuevo Laredo, Tamaulipas.
La situación jurídica de Olvera Amezcua, será resuelta esta tarde, cuando Felipe de Jesús Delgadillo Padierna, juez de control del Centro de Justicia Penal en el Reclusorio Sur, resuelva las imputaciones de la FGR, por su presunta responsabilidad en el delito de defraudación fiscal por 185 millones 41 mil 280 pesos.
Olvera Amezcua debe permanecer en prisión ante el riesgo de que evada la justicia, así lo solicitó la Fiscalía ante el juez, pues no tiene un domicilio, tiene acceso a recursos económicos que le facilitarían abandonar el territorio nacional y porque existen más investigaciones en su contra.
Parte de su fraude es que en sus declaración fiscales, consistente en el Impuesto Sobre la Renta en 2013 dijo tener ingresos acumulables menores a los realmente obtenidos, toda vez que declaró haber recibido 10 millones 270 mil 132 pesos, pero la autoridad fiscalizadora detectó que obtuvo 627 millones 75 mil 333 pesos, con lo cual dejó de pagar el ISR por 185 millones 41 mil 280 pesos.