Gerardo Sosa Castelán, presidente del Patronato de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), se encumbró como un connotado constructor de centros comerciales, edificios, condominios y otras obras civiles en su estado.
Todo eso fue gracias a la creación de dos empresas, las cuales son el Grupo Inmobiliario Bujarin y Grupo Inmobiliario Quinto, que planean, ejecutan y supervisan proyectos, obras públicas o privadas y construcciones de casas, edificios, condominios hoteleros, centros comerciales, viviendas de interés social.
El exrector de la UAEH, una institución educativa investigada por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) por un presunto lavado de dinero de 156 millones de dólares movidos del extranjero a México, fue buscado por dicha unidad para que explicara si tiene contratos vigentes de obra de sus firmas con el gobierno, la universidad y otras organizaciones.
Sin embargo, no había respondido ninguno de los cuestionamientos y preguntas sobre su vida, negocios, relaciones, la universidad, los espías y el bloqueo de cuentas bancarias por parte de la UIF.
CONSTRUCTORAS EN CONFIANZA
Las constructoras del político hidalguense tiene como socios registrados a sus hijos Adriana Sosa Cravioto, Gerardo Sosa Cravioto (quien falleció en una balacera el pasado 23 de febrero) y Ana Carmen Sosa Cravioto, según documentos a los que tuvo acceso El Sol de México.
La notaría pública de Juan Manuel Camacho Ángeles, quien es hijo del exrector de la UAEH Juan Manuel Camacho Ángeles, fue la encargada de constituir Grupo Inmobiliario Quinto el 13 de enero de 2014 y Grupo Inmobiliario Bujarin el 21 de junio de 2017.
El expresidente del PRI en Hidalgo y del Club de Futbol Pachuca es accionista desde el 2007 de Uni-Comercializadora, una compañía dedicada a la compra, venta, administracion, mediación, arrendamiento y comercialización de inmuebles.
Celerino Cabrera Reyes, corredor Público Número 1 en Pachuca y responsable del Área de Transferencia de Tecnología y Propiedad de la UAEH, fue el encargado de hacer los cambios a la comercializadora que vende, importa y exporta mobiliario, herramientas, maquinaria, equipo, refacciones, implementos, instrumentos, materiales, útiles y artículos varios.
Para fundar tres empresas, Sosa Castelán, quien aparece en la escena política de Hidalgo en 1977 como presidente de la Federación de Estudiantes Universitarios de Hidalgo, desembolsó más de un millón 570 mil pesos.
LA FAMILIA
Para el político hidalguense, la familia ha significado una expansión de las operaciones tanto políticas como empresariales, pues ellos lo han seguido tanto con sus movimientos de partido, así como con las necesidades que sus empresas y proyectos requieran.
Los hermanos del exrector de la UAEH lo han acompañado en esa aventura por tener el poder: Uno de ellos Óscar Damián, quien fue presidente de la Fundación Hidalguense y es el accionista mayoritario en la Inmobiliaria Amanaque, que ofrecer los mismos servicios que las compañías de su hermano Gerardo.
Su otra hermana, Victoria Olga Sosa Castelán, quien actualmente está vinculada con el partido de Morena desde su renuncia a la militancia priísta antes de las elecciones presidenciales de 2018. Su tercer hermano, Arnulfo Sosa Castelán (quien pereció en abril de 2018), creó el 1 de febrero de 2003 la empresa Grupo la Bóveda ante un notario público en Huejutla de Reyesy junto con sus hijos Luis Sosa Campos y Erick Sosa Campos, así como su esposa Maricela Campos Hernández entregaron mil pesos de capital para constituir la constructora.
Los socios de Damián Sosa son Fernando Crescencio Ríos Castañeda, exdirector de Proyectos y Obras de la UAEH; José Ananías Hernández Baños, director de la Villa Deportiva de la UAEH y Óscar Pacheco Medina, es un constructor que también está asociado con Gerardo Sosa Castelán a través de Grupo Inmobiliario Quinto, y además es accionista de la empresa Ospame de Hidalgo y de Servi-Garza UAEH, una compañía dueña de una estación de servicio de gasolina dentro de la región de Pachuca. La Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo y Pacheco Medina tienen una empresa que comercializa gasolinas y diésel suministrados por Pemex Refinación, así como la comercialización de aceites lubricantes de la marca Pemex, lo cual ha generado diversas investigaciones con sus contratos.