Ismael "El Mayo" Zambada, uno de los fundadores y líderes del Cártel de Sinaloa, tendrá su próxima comparecencia el 31 de julio ante un tribunal de El Paso, Texas, luego de declararse no culpable de cargos de narcotráfico, según registros judiciales.
El capo mexicano renunció a su derecho a personarse ante la justicia y ordenó que se presentara la declaración en su nombre, mientras el tribunal dictaminó que no tiene derecho a fianza.
En uno de los golpes más duros al Cártel de Sinaloa, El Mayo Zambada y Joaquín Guzmán López, hijo de su exsocio Joaquín El Chapo Guzmán, fueron detenidos el jueves pasado en El Paso, Texas. Ambos enfrentan cargos por trasiego de drogas a Estados Unidos, incluido el letal fentanilo, causante de decenas de miles de muertes cada año en ese país.
Zambada, por el que las autoridades estadounidenses ofrecían una recompensa de 15 millones de dólares, y Guzmán, por el que ofrecían cinco millones, fueron arrestados tras aterrizar en un avión privado.
Horas antes, el gobierno de México informó que no participó en la operación que derivó en la detención de los narcotraficantes.
La tarde del viernes, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) informó que desplegó a 200 efectivos de las fuerzas militares especiales en Sinaloa "para apoyar con la estrategia de seguridad e inhibir las actividades de la delincuencia organizada".
"Estos 200 elementos tienen la misión de colaborar con las autoridades locales para revertir los índices delictivos, así como preservar y garantizar la libertad, el orden y la paz pública", añadió en un comunicado, sin hacer referencia a las aprehensiones de El Mayo Zambada y Joaquín Guzmán López.