La Asociación de Periodistas Desplazados y Agredidos rechazó la versión de la Fiscalía General del Estado de Guerrero sobre la muerte del fotógrafo Erick Castillo sea por un intento de robo.
A través de pronunciamiento en sus redes sociales, la agrupación exige a los tres niveles de gobierno, de Chilpancingo, del estado y al Gobierno Federal, una investigación conjunta para evitar toda posible contaminación en lo que a técnicos forenses les parece, un asesinato focalizado.
"Creemos que el país sufre un cáncer derivado del conflicto de intereses entre los grupos políticos en los que ya se ha comprobado, se eliminan vidas para preservar, por medio del terror desde la violencia, cotos de poder", señala.
Detalla que la Asociación ha logrado acceder a la información previa pericial, y creen, dados los datos capturados, no se trató de un robo con violencia como se trata de hacer creer a las sociedades y al gremio de periodistas.
Exige que toda investigación parta, y sea corroborada y analizada por la víctima sobreviviente, Estefanía Carpio Avila, esposa de Castillo, "que es sin duda, el punto de partida para definir si se trató de un crimen común, o lo que creemos; que fue planeado".
"Al Presidente, Andrés Manuel López Obrador, nos dirigimos buscando justicia no solo para el gremio, sino, para una nación lacerada y torturada; un paraíso en llamas", finaliza.