Encarnación de Díaz, Jalisco.- El Gobierno de la República y el de Jalisco trabajarán de la mano y con diálogo directo, así lo acordaron el presidente Andrés Manuel López Obrador y el gobernador Enrique Alfaro Ramírez, tras fumar la pipa de la paz ante el capital político de cada uno reunido en el municipio de Encarnación de Díaz.
En su primera gira oficial de trabajo por la entidad, el jefe del Ejecutivo Federal agradeció el apoyo que le mostró el gobernador de Jalisco y prometió que ya no más confrontaciones, ya que se necesita de todos para lograr la transformación.
Desde la llegada de ambos mandatarios al evento, realizado en la comunidad de La Chona, los seguidores concentrados en el estadio de beisbol comenzaron a lanzar porras para uno y otro; atrás quedaron los abucheos, tal como se prometió a lo largo de la semana y que había sido la tónica de visitas a otros estados.
Con algo de nerviosismo, el mandatario de Jalisco habló claro y de frente al decirle que ya no más pleitos políticos y que la relación entre ambos será de amplio diálogo.
“Quiero decirle Presidente que estamos listos para sumarnos al esfuerzo que usted encabeza, que creemos que Jalisco puede poner el ejemplo de cómo se construye justicia siendo también más productivos, poder lograr cambiar para siempre el camino del campo, acabar con los acaparadores” y llevar la justicia social a todos; y le reconoció que esa es la lucha que López Obrador desde hace varios años impulsa y que le valió ganarse el respeto de todos.
Ante una temperatura superior a los 25 grados y los candentes rayos del Sol, Alfaro Ramírez indicó que “independientemente de cuestiones políticas, siempre será para un servidor decir que es un honor ayudarle al presidente de México a sacar adelante a la nación”.
En su turno al bate, López Obrador no quiso quedarse rezagado y también lanzó un home run al refrendar lo dicho por el mandatario anfitrión y con quien se retiró al siguiente evento en la misma camioneta y el mismo convoy que se dirigió al evento de la ciudad de Guadalajara.
“Agradeciéndole al ciudadano gobernador Enrique Alfaro por su apoyo, por su colaboración, por su respeto, tenemos que ir juntos todos a la transformación de México, nada de pleitos, tenemos que unirnos, la Cuarta Transformación significa también la reconciliación nacional”, tras lo cual prometió que iba a regresar a Los Altos para evaluar el desarrollo del programa de apoyo a los productores de leche.