GUANAJUATO. Ante la crisis económica que se aproxima a consecuencia de la emergencia sanitaria por Covid-19, y a través de la convocatoria a una Convención Nacional Hacendaria, los 11 gobernadores que conforman la Alianza Federalista buscan que la Federación entregue más recursos a las entidades con un nuevo pacto fiscal.
Tras más de cuatro horas de reunión en la capital guanajuatense, en rueda de prensa el gobernador de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez Vallejo, adelantó que uno de los acuerdos de la alianza fue solicitar al gobierno federal una urgente Convención Nacional Hacendaria, donde se traten los cambios necesarios al Sistema Nacional de Coordinación Fiscal ante la crisis económica que se pronostica tras la pandemia.
“Convoqué a los gobiernos locales, poderes del estado, organismos, organizaciones, especialistas y dependencias de entidades vinculadas a la celebración de una urgente Convención Nacional Hacendaria para reflexionar sobre los necesarios cambios que requiere el Sistema Nacional de Coordinación Fiscal de cara a una de las peores crisis económicas y humanitarias que México enfrentará en los meses inmediatos”, manifestó.
Silvano Aureoles, gobernador del estado de Michoacán, señaló que la actual crisis sanitaria evidenció la ambigüedad del actual pacto fiscal como el principal método para distribuir la riqueza pública del país, pues permite la concentración del 80 por ciento de los ingresos públicos en el gobierno federal.
“Permite la concentración del 80 por ciento de los ingresos públicos en el gobierno central y reparte solamente el 20 por ciento hacia los 32 estados y a los más de dos mil 400 municipios cerrando toda posibilidad para que los gobiernos subnacionales fortalezcamos las acciones por el bienestar social”.
El gobernador de Michoacán mencionó que se espera una contracción en la economía mundial aproximada de 4.9 por ciento, además de una caída de entre 9 y 10.5 por ciento en el Producto Interno Bruto (PIB) tras la pandemia, de acuerdo a los pronósticos del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Entre los daños que ha generado la pandemia del coronavirus en México, Aureoles precisó que más de un millón de empleos formales se han perdido, y el paro de más de 12 millones de trabajos, lo que derivará en un incremento sustancial de la pobreza en nueve millones de personas aproximadamente.
“Lo que implica que este año se perderán los avances de una década de combate a la pobreza y la marginación, la gran fragilidad de la economía también se pone de manifiesto en otros rubros de la vida nacional, principalmente por los altos niveles de desigualdad social”, expuso.
Urgió la necesidad de crear un nuevo pacto fiscal y que la Federación distribuya de manera justa los recursos públicos para que los gobiernos locales apoyen a los ciudadanos a salir delante de la crisis venidera.
“Los gobernadores solicitamos que el presupuesto federal del año 2021 no se construya con la inercia negativa que se ha mantenido durante los últimos años que en nada contribuye para que los estados y municipios afrontemos esta crisis, no es un tema de partidos o colores, es un tema de justicia para los ciudadanos”, dijo.
En la reunión estuvieron los gobernadores de Guanajuato, Diego Sinhue Rodríguez; de Nuevo León, Jaime Rodríguez; José Ignacio Peralta, de Colima; el coahuilense Miguel Ángel Riquelme; el gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca; el mandatario de Durango, José Rosas Aispuro, el ejecutivo de Michoacán, Silvano Aureoles, y de Aguascalientes, Martín Orozco.