A partir del primer minuto del 21 de agosto jueces y magistrados del Poder Judicial de la Federación se sumaron a la suspensión de labores iniciada por trabajadores independientes de la institución.
El paro se formalizó en las escalinatas de la sede del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) de San Lázaro, donde la jueza Juana Fuentes Velázquez —directora nacional de la JUFED— señaló que el paro será indefinido y solo culminará cuando la Cámara de Diputados deseche la reforma judicial próxima a discutirse.
"Hemos decidido, junto a cientos de personas juzgadoras comprometidas con la justicia, la suspensión de labores jurisdiccionales de manera indefinida en todo el país a partir de este 21 de agosto", expresó Fuentes Velázquez en representación de cientos de juzgadores del país.
La suspensión de labores, agregó la jueza, surge "como un acto legítimo de resistencia contra esta reforma y hasta que ésta sea desechada, para dar paso a la construcción de una reforma integral del sistema de justicia a la que sin duda alguna nos sumaríamos. Esta acción no es tomada a la ligera, es una medida extrema en respuesta a una amenaza extrema", apuntó Fuentes Velázquez.
Previamente, mediante una declaratoria, la Asociación de Jueces de Distrito y Magistrados de Circuito del PJF (JUFED) afirmó que el paro incluiría a todos los órganos jurisdiccionales que componen el PJF, a excepción de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y el Tribunal Electoral del PJF.
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Además, recalcaron que atenderán asuntos urgentes en materia penal (extradiciones, calificación de detenciones, vinculaciones a proceso irregulares); en materia civil (pensiones alimenticias y violencia intrafamiliar); y en materia administrativa y laboral, como son huelgas.
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