El presidente de la Junta de Coordinación Política del Senado, Ricardo Monreal, dijo que para aprobar las leyes secundarias de la Guardia Nacional buscarán unanimidad, aunque no es necesaria.
“No necesitamos mayoría calificada, menos unanimidad. Como son leyes reglamentarias bastaría con la mayoría simple, que la tenemos en Morena. Sin embargo, no tendría la legitimidad a la que aspiro y por eso hacemos un gran esfuerzo por lograr la unanimidad y hasta ahora lo hemos logrado”, afirmó.
Por otra parte, subrayó que ante la crisis de inseguridad y violencia, siendo estas leyes reglamentarias “instrumentos tan importantes y fundamentales, tenemos que lograr que estén abrigadas, arropadas con el mayor sentido de unidad”.
En la construcción de las cuatro leyes reglamentarias de la Guardia Nacional, las Fuerzas Armadas actúan de manera extraordinaria y con respecto hacia el Legislativo, afirmó.
“Veo incluso una actitud, debo decirlo y reconocerlo, muy respetuosa al Legislativo de las Fuerzas Armadas. Han actuado de manera extraordinaria, con sensatez, con cuidado, con respeto y hemos tenido consideraciones, opiniones correctas en el diseño y la construcción de estas leyes fundamentales”, precisó.
Insistió en que es un debate de fondo el tema de las licencias y el que en la Guardia Nacional prevalezca su carácter civil y también el mando, la disciplina, los delitos y toda la organización de carácter civil.
Y puntualizó: “Nosotros estamos a favor de que se mantenga el carácter civil. Nosotros confiamos en la disciplina castrense.
Confiamos en que la formación de ellos pueda dar resultados inmediatos en la Guardia Nacional, pero insisto, será mando civil, no mando castrense.
Indicó que las cuatro leyes secundarias son: la Ley del Uso de la Fuerza; Ley del Registro de Detenciones; modificaciones a la Ley de Seguridad Pública y la Ley Orgánica de la Guardia Nacional.
Por separado, el vice coordinador de la bancada del PAN, el senador Julen Rementería, dijo que “la verdadera esencia de la divergencia con Morena y el gobierno, consiste en que nosotros queremos que se deje bien claro el carácter civil de la Guardia Nacional”.
Y enfatizó: “La discusión es cómo hacer que puedan conservar todos sus derechos los militares, pero al mismo tiempo, quede perfectamente claro que es un acuerdo de naturaleza civil”.
Confió que eso es lo único que los detiene. “Todo lo demás ya está resuelto”.