Villahermosa, Tabasco.- En el tránsito a una economía petrolera de subsistencia, México ya no venderá el hidrocarburo crudo al extranjero y producirá 2 millones 600 mil barriles diarios al final del sexenio, casi un millón menos del que produjeron en el 2003 y del que se supone obtendría este gobierno con la reforma energética del presidente Enrique Peña Nieto, anunció el presidente electo Andrés Manuel López Obrador.
Al final de una reunión a puerta cerrada con los gobernadores saliente y electo de Tabasco, Arturo Núñez y Adán Augusto López, en el Palacio de Gobierno, comentó que el objetivo es apostar por otras fuentes de energía y conservar los recursos no renovables para las siguientes generaciones.
Después del encuentro de dos horas, aseveró que "contra viento y marea la refinería (Dos Bocas, Paraíso) va", aunque les pongan trabas, porque son expertos en la carrera de obstáculos y es necesario reactivar la economía de la península del sureste.
López Obrador dio a conocer que él personalmente asesorará este proyecto, en el que trabajará en coordinación con el gobernador electo de Tabasco; por lo que cada mes visitará el estado para supervisar la obra que tendrá un costo de 160 mil millones de pesos.
"Necesitamos tener una producción petrolera para finales del sexenio próximo de alrededor de 2 millones 600 mil barriles. No aspiramos a extraer mucho petróleo porque esa es una herencia que se le tiene que dejar a las nuevas generaciones, vamos a extraer solo lo que se necesita para nuestro consumo interno. Ya no se va a vender en el mediano plazo petróleo crudo al extranjero", explicó en conferencia de prensa.