El presidente Andrés Manuel López Obrador exigió a las organizaciones sociales que dejen de ponerle trabas a la Guardia Nacional, pretextando que habrá una militarización del país.
Ahora que queremos nosotros atender este problema gravísimo, en vez de que ayuden, nos están poniendo trabas, esa es la verdad.
A la vez que pidió a los legisladores del Congreso de la Unión que atiendan la petición de los ciudadanos y no escuchen a los expertos que se la pasan “haciendo análisis de la sociedad, sin transformarla”, tras sostener que más del 90 por ciento de la ciudadanía pide que avance la iniciativa de ley al artículo 21 constitucional.
Ojalá y los legisladores, le hagan caso a la gente, al final de cuentas son representantes del pueblo, porque siempre son los expertos, los que deciden o los integrantes de la llamada sociedad civil y el pueblo raso, no es tomado en cuenta como si no existiera, como si no supiera y el pueblo es sabio.
López Obrador argumentó que la Guardia Nacional “es urgente, es una preocupación”, porque la Policía Federal no tiene la indumentaria para abatir los homicidios en el país.
Solo tiene 20 mil elementos a su servicio, mientras que los 230 mil militares y 40 mil marinos que podrían auxiliarlos, son inoperantes porque la máxima normativa no permite su intervención en los delitos del fuero común.
Ya basta también de la simulación, de estar nomás haciendo análisis de la sociedad, sin transformarla, ya que se acabe el elitismo, unos cuantos opinando por todos.