Alejandro Rojas Díaz Durán, consejero de Morena en la Ciudad de México, pidió que el proceso en su contra por este partido político sea público, de lo contrario “sería desastroso para la transparencia y la democracia interna”.
Al coordinador de asesores de Morena se le inició un proceso por presuntas transgresiones a los estatutos, luego que criticara la designación de Miguel Barbosa como candidato de este partido a la gubernatura de Puebla y que por ello denunciaría a la dirigente nacional, Yeidckol Polevnsky.
“Al partido al que pertenezco, Morena, le solicito, muy respetuosamente, que mi juicio sea público. El no hacerlo sería desastroso para la transparencia y para la democracia interna y, además, convertiría a los miembros de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia en los nuevos Torquemadas de una Inquisición partidaria”, señaló en una carta posteada en su cuenta de Twitter.
Señaló que Morena “debe ser el máximo garante de la libertad de expresión en México y no el principal sancionador y represor de la conciencia crítica de nosotros los militantes”.
Fustigó que no tienen el derecho de prohibir y “sofocar de manera represiva y autoritaria la crítica interna, como si la dirigente nacional fuese intocable o estuviese blindada por una áurea divina”.
“Más que juzgarme, deberían alentar el debate democrático, impulsar la tolerancia, respetar a la pluralidad de opiniones divergentes y garantizar el derecho a la libertad de expresión que, por cierto, es la base de la libertad y de los derechos humanos, que son por excelencia inalienables, irrenunciables e imprescriptibles”, indicó.
“Más bien, pareciera que la quieren proteger a toda costa de los que no coincidimos con su muy particular visión ideológica de la realidad y que -ratifico- está llevando a Morena a una colusión con las bases y con los liderazgos que no son tomados en cuenta, agregó.