Francisco Garduño Yáñez, recién nombrado por Andrés Manuel López Obrador al frente del Instituto Nacional de Migración tendrá una nueva encomienda para atender la emergencia y problemática sobre flujo migratorio en el sur del país, ante los acuerdos con Estados Unidos.
La principal responsabilidad será hacer los enlaces con las autoridades migratorias para participar en los objetivos de ese plan, pues el punto principal es registrar y dialogar con las personas para determinar las opciones de su destino.
En caso de que Garduño Yáñez sea el titular del INM, tendrá que dejar el cargo que hasta ahora ostenta como encargado del Órgano Administrativo Desconcentrado de Prevención y Reinserción Social.
Doctor en Derecho y Ciencias Jurídicas por la Universidad del Distrito Federal y Maestro en Derechos Humanos por la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez tendrá una nueva encomienda, para participar en la Comisión Especial para atender a migrantes.
Desde 1972 ha colaborado en la administración pública, donde participó en el diseño de programas y proyectos como la creación del Instituto Nacional de Ciencias Penales y la estructura organizacional del Consejo Tutelar para Menores del entonces Distrito Federal.
Fue secretario del Comité Técnico para la Reforma Penitenciaria en el Distrito Federal, para el cierre del penal de Lecumberri y traslado de internos a los actuales reclusorios de la Ciudad de México y a la colonia Penal Islas Marías
El martes pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que en la Comisión Especial para atender a migrantes estará conformada por Vicente Antonio Hernández Sánchez, Javier May Rodríguez, Horacio Duarte Olivares y Maximiliano Reyes Zúñiga.
Todos ellos tendrán la labor y la estrategia para hacer funcionar el plan sobre el flujo migratorio en México, que es de 90 días, en los que se podrá acreditar que es posible atemperar el fenómeno migratorio con desarrollo y bienestar, como lo demanda el mandatario.