El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño, aseguró que “se logró revertir la tendencia de los delitos a nivel nacional” porque en abril de este año se registraron dos mil 950 homicidios dolosos en el país, mientras que en marzo hubo tres mil personas asesinadas. Guanajuato, sin embargo, se mantiene como la entidad como mayor incidencia.
Ayer, diez horas después de la presentación de Durazo, atacaron al coordinador operativo de seguridad en Tarimoro, Guanajuato, Juan Francisco Alejandri Vazquez, quien tuvo que resguardarse en la comandancia municipal. Esto es sólo una fotografía de la violencia que diariamente hay en esta entidad pese al despliegue de al menos dos mil 200 elementos de la Guardia Nacional.
Este ambiente derivó en las protestas del martes pasado en distintos puntos de Guanajuato donde la sociedad civil exigió seguridad. Además, en lo que va del año han matado a 34 policías en esta entidad, de acuerdo con el registro de la organización Causa en Común.
En su exposición, Durazo Montaño presentó los municipios de mayor incidencia por cada 100 mil habitantes, Celaya, León, Salamanca e Irapuato aparecen en esa lista.
Durazo Montaño resaltó que para reducir el homicidio doloso se ha registrado “un esfuerzo importante” en entidades como Sinaloa, Durango, Coahuila, Tamaulipas, que históricamente tuvieron los primeros lugares en este delito.
En este sentido, el funcionario federal admitió que en algunos estados como en Sonora, este tipo de ilícitos se han complicado, pero se han desplegado un número importante de fuerzas federales.
En las cifras presentadas, detalló que en torno a los feminicidios “afortunadamente también hay una tendencia a la baja”, dijo que ha sido un 30 por ciento menos en comparación con diciembre de 2018, y de 10.25 por ciento, respecto a marzo, al igual que en secuestros, extorsión, en incidencia delictiva y robos en general.
El secretario de Seguridad Pública federal abundó que de enero a abril, el robo de vehículos disminuyó 20.9 por ciento; en transporte público, 44.6 por ciento; a transeúnte, 24.6 por ciento; robo a casa-habitación, 18 por ciento; a negocios, 20.3 por ciento; en taxi, 25.9 por ciento; de ganado, 27.7 por ciento; a transportista, 34.3 por ciento.
En este contexto, el activista Bryan LeBarón comentó que si se retira el Ejército de las tareas de seguridad, dejaríamos a la población bajo el cuidado de las policías civiles locales, lo que en la mayoría de los estados representa dejar a la población a merced de los grupos criminales.
Además, consideró que el retornar el Ejército a los cuarteles y detener la militarización de la seguridad pública, se estaría dejando en total libertad para que los criminales sigan operando en los estados y municipios.
“No defiendo la presencia del Ejército en las calles, pero imaginemos un México que un día se despierta sin su protección, seríamos un flanco fácil, el más vulnerable”, expuso.
Al hacer mención sobre la reducción de las cifras mostradas por el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo Montaño, Bryan LeBarón sostuvo que se puede observar la incapacidad de la mayoría de los gobernadores y de los organismos de seguridad en las entidades del país, en el sentido de garantizar seguridad a los mexicanos.
“El reto de retirar al Ejército de las calles no debe ser cuando esté lista la Guardia Nacional, sino cuando seamos capaces de tener policías estatales y municipales limpias y sin dependencia de los grupos criminales”, consideró el activista.
Por anterior, el integrante de la familia LeBarón, pidió a Alfonso Durazo “no bajar la guardia por las disminuciones marginales, por citar los 50 homicidios dolosos menos entre marzo y abril, ya que de los 3 mil casos bajó a 2 mil 950 casos”.
Enfatizó que la estrategia debe pasar por identificar y estudiar qué es lo que se está haciendo bien en entidades como Baja California Sur, Yucatán o Campeche; y los aspectos que no permiten brindar seguridad en estados como Guanajuato, Estado de México o Chihuahua.
Por último, Bryan LeBarón pidió mantenerse alerta y prender “los focos rojos” en las próximas elecciones, por lo pugnó a que se dé un debate al interior y entre los partidos, para evitar que se presenten “narcocandidatos” o que el dinero del crimen sea el que decida las contiendas.
“Porque no hay nada gratis, llegando al poder la delincuencia organizada busca recuperar su inversión y hasta hoy ha dejado un rastro de sangre, y autoridades impregnadas de corrupción”, finalizó.
Con información de Oscar Reyes | El Sol de Irapuato