Ante la voluntad de Morena, en el Congreso de la Unión, por desaparecer la Comisión Nacional de Protección Social en Salud y su brazo operativo el Seguro Popular, seis exsecretarios de Salud, advirtieron que una recentralización en el sistema de salud, merece una genuina y cuidadosa discusión de alcance nacional.
En este sentido, los exsecretarios de Salud, Mercedes Juan López, José Narro Robles, Guillermo Soberón, Julio Frenk, Salomón Chertorivski y José Ángel Cordova urgieron al Poder Legislativo y a la Presidencia de la República una mesa de diálogo en la que participe todo el sector salud, entre médicos, especialistas académicos y organizaciones de la sociedad civil, ya que advirtieron que el regreso a la centralización de estos servicios debilita el federalismo.
"Se trata de un tema que no admite precipitación e improvisación. Nada de lo que al paso del tiempo se ha conseguido en el sector, se explica con cambios súbitos no estudiados. Por el contrario, los avances son resultado del análisis cuidadoso, de la continuidad y la coherencia", coincidieron los seis extitulares de la Secretaría de Salud, quienes enviaron su posicionamiento a los poderes legislativo y ejecutivo, respectivamente.
"Quienes firmamos este documento,nos pronunciamos por el entendimiento, el diálogo y la razón", se lee en la misiva.
Los exfuncionarios públicos, quienes también participaron en el Foro "El Sistema de Salud en México: ¿Transformación o crisis?", Organizado por el Consejo Consultivo Ciudadano de Pensando México, criticaron cómo un error crucial la voluntad por desaparecer la Comisión Nacional de Protección Social y el Seguro Popular, cuando lleva más de tres lustros de historia y ha multiplicado el número de afiliados por quince en apenas 10 años.
Recordaron que fue el pasado 3 de julio cuando el grupo parlamentario de Morena, en la Cámara de Diputados, presentó una iniciativa que reforma disposiciones de la Ley General de Salud, la Ley de Coordinación Fiscal y la Ley de los Institutos Nacionales de Salud.
"No ignoramos los rezagos, errores o problemas en el Seguro Popular ni en el resto del sistema, pero insistimos, forman parte de una larga historia que ha alcanzado metas y logros notables con gran esfuerzo y continuidad en los programas, a pesar de las permanentes y severas limitaciones y carencias", apuntaron.
Mencionaron que el Seguro Popular ha atendido 308 mil casos de enfermedades muy severas, de entre las familias más pobres de México, quienes resaltaron, no perdieron su patrimonio ni se arruinaron, precisamente porque existe el Seguro Popular y su instrumento financiero para atender las enfermedades de alto costo y complejidad: el Fondo de Protección Contra Gastos Catastróficos (FPGC).
"Este es el sentido profundo del Seguro Popular: evitar el empobrecimiento de las familias ante la eventualidad de una enfermedad muy grave, como el cáncer o el VIH/SIDA", denunciaron.
Al coincidir plenamente durante el foro de análisis de esta nueva perspectiva para ofertar servicios de salud a los no derechohabientes, los exfuncionarios del sector salud acortaron que son posibles cambios en el nombre, en la administración,distribución, implementación, o bien que se construyan nuevos mecanismos necesarios, en tanto se garantice esta atención a la población más necesitada de México, quienes se encuentran en niveles de pobreza y pobreza extrema y no cuentan con seguridad social.
Para ello, exigieron que su mejora sea parte de gran cambio y de políticas de Estado que estén por encima de prejuicios ideológicos o agendas partidistas, tal como lo exige la complejidad de los retos en materia de salud.
También advirtieron que la iniciativa legislativa plantea el objetivo concreto de regularizar la situación laboral de 80 mil médicos, por lo que demandaron que este fin "no puede conseguirse a costa de destruir la base que soporta y financia la atención a las enfermedades catastróficas que se presentan en la población no derechohabiente de la seguridad social".