El gobierno de Colombia exigió justicia para los dos estudiantes de medicina asesinados el lunes pasado en Puebla, pero que no son los únicos que han sufrido las consecuencias de la delincuencia en México, pues hay un registro de 102 colombianos desaparecidos en nuestro país.
En entrevista con El Sol de México , Luis Oswaldo Parada Prieto, cónsul general de Colombia, consideró como “inverosímil” que Ximena “N”, de 25 años y José Antonio “N”, de 22 años, hayan sido asesinados por “un sombrero” como apuntan las investigaciones de la Fiscalía de Puebla.
“No es justo que estos dos muchachos hayan muerto supuestamente por un sombrero o porque alguien quería robar el auto en el que viajaban. Realmente resulta inverosímil y aunque respetamos las líneas de investigación, nos resulta absurdo, algo realmente incomprensible, que alguien tenga la capacidad de asesinar a cuatro personas, porque también lamentamos la muerte de los dos ciudadanos mexicanos, por un sombrero de superfluo valor”, afirmó el diplomático.
Los dos estudiantes de medicina fueron asesinados la madrugada del pasado 24 de febrero en la localidad de Santa Ana Xalmimilulco, Puebla.
Aunque el martes, el titular de la Secretaría de Gobernación, David Méndez enfatizó que la principal línea de investigación era el robo de vehículo, pero el miércoles, la Fiscalía poblana comenzó la línea de investigación sobre un pleito por el sombrero de Ximena.
Según la Fiscalía, los jóvenes asistieron al carnaval de Huejotzingo donde tuvieron un pleito por el sombrero. Alrededor de las 10 de la noche solicitaron un Uber para que los llevara a Puebla, pero horas después fueron encontrados muertos con heridas de bala.
Tres personas fueron detenidas por los hechos, en los que también fueron asesinados el también estudiante de medicina Francisco Javier “N”, de 22 años, oriundo de Veracruz; y el poblano José Manuel “N”, de 28 años, quien era conductor del Uber que las víctimas solicitaron para que los llevara a Puebla.
Ayer, dos de los tres detenidos por estos hechos fueron puestos en libertad, luego de que un juez calificara de ilegal su detención por el delito de usurpación de funciones públicas; no obstante al salir de Casa de Justicia de San Andrés Cholula, agentes ministeriales los reaprehendieron por el delito de homicidio.
En tanto, el juez de la causa, consideró que la aprehensión de Pablo de Jesús "N" se hizo conforme a derecho, por lo que calificó de legal su arresto. Mientras que el juez calificó de ilegal la detención de Ángel "N", y Lisset "N", pero no duraron mucho tiempo en libertad, pues de nuevo están detenidos por su presunta participación en el crimen.
Aunque estos últimos dos personajes fueron reaprehendidos por agentes ministeriales afuera del centro de justicia penal de San Andrés Cholula, la audiencia para definir la situación jurídica de Pablo de Jesús continuaba.
El cónsul Parada Prieto señaló que los colombianos se encontraban desde agosto pasado prestando servicio en el Hospital General de Cholula y provenían de la Universidad Unisánitas de Bogotá.
Ambos ejercían como médicos internos en la Universidad Popular Autónoma del Estado de Puebla (UPAEP), quienes estaban culminando su año de internado.
Los cuerpos de los jóvenes fueron repatriados ayer desde la Ciudad de México a su país, donde serán esperados, hoy, por sus compañeros de universidad quienes realizarán una marcha e iniciarán una vigilia para exigir justicia.
“No puede caer el pueblo mexicano en esta desolación, en esta inseguridad, en esta deshumanización, lo que pasa con los feminicidios, lo que vemos en los medios es realmente alarmante”, insistió.
Luis Oswaldo Parada hizo énfasis en su llamado a las autoridades migratorias mexicanas para que atiendan a la comunidad colombiana en el país, ya que tiene registro de por lo menos 102 colombianos desaparecidos en México, y en los últimos años se registró el número más alto de rechazos para ingresar a México.
“Más que emitir alertas de viajes, nuestro llamado es para que se mire a la migración de otra forma, porque desafortunadamente México se convirtió en el país que más inadmite colombianos en todo el mundo, por encima de Estados Unidos y Europa”, subrayó el diplomático.
Destacó que sólo el año pasado, cinco mil 900 colombianos, incluidos estudiantes de la Alianza del Pacífico, fueron rechazados para ingresar a México, una cifra “aberrante” que no responde a los principios de reciprocidad entre ambas naciones, ya que por su parte Colombia sólo no autorizó el ingreso a su territorio a 245 mexicanos, en el mismo periodo. “Estamos trabajando fuertemente con las autoridades mexicanas, hemos llegado a altas instancias, hemos dialogado permanentemente con el alto Comisionado (Francisco) Garduño, pero desafortunadamente las cifras no disminuyen y por el contrario aumentan”, dijo el diplomático sudamericano.
El colombiano reafirmó el compromiso de su país, que en la década de los 80 y 90 padeció la violencia generada por cárteles de la droga, para colaborar en la pacificación de México; a la vez que aseguró que, pese al asesinato de los jóvenes médicos, no se suspenderán los convenios para que estudiantes colombianos vengan a estudiar a nuestro país.
Con información de Paulina Gómez/El Sol de Puebla