Gilda Margarita Austin, madre de Emilio Lozoya, fue vinculada a proceso por los presuntos delitos de asociación delictuosa y lavado de dinero, pero lo enfrentará fuera de la cárcel ya que fue sometida a arraigo domiciliario.
En la audiencia efectuada en el Reclusorio Norte, que duró más de nueve horas, ambas partes aceptaron el arraigo domiciliario, por lo que la madre de Emilio Lozoya seguirá su proceso en libertad, aunque el juez ordenó retirarle el pasaporte y vigilancia las 24 horas para evitar su fuga, al tiempo de darle seis meses de investigación complementaria.
Al filo de las 4:00 horas, Gilda Austin arribó a la Terminal 1 del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) procedente de Alemania en un vuelo comercial, país en el que fue detenida en julio pasado.
Fue custodiada por elementos de la Policía Internacional (Interpol) en el trayecto del viaje y entregada a autoridades de la Fiscalía General de la República (FGR), quienes la trasladaron al Reclusorio Norte donde se llevó a cabo la audiencia donde enfrentó las acusaciones de presuntas operaciones por recursos de forma ilícita derivada de la compraventa de una planta de nitrogenados a Alfonso Ancira de Altos Hornos de México.
En la audiencia, que comenzó a las 10:00 horas de ayer, la FGR solicitó la vinculación a proceso de Austin, al considerar que existen elementos de prueba para acreditar que una de sus cuentas bancarias fue utilizada para recibir recursos de los sobornos que la constructora brasileña Odebrecht le pagó al exdirector de Petróleos Mexicanos (Pemex), Emilio Lozoya Austin, por un monto de cuatro millones de dólares.
El Juez Jesús Vázquez Rea fue el encargado de presidir la audiencia en donde se le imputaron a Austin los cargos de asociación y operaciones con recursos de procedencia ilícita.
En esta audiencia, se le informó sobre la trama en la que presuntamente participó al recibir pagos o sobornos por parte de la empresa brasileña Odebrecht. Se detalló que en su cuenta bancaria se hicieron siete depósitos entre el 2010 al 2015.
Se dio cuenta que el 16 de noviembre de 2010, recibió cinco millones de pesos, mientras que el 8 de junio de 2011 recibió 900 mil pesos y el 21 de ese mismo mes y año recibió 1.7 millones de pesos.
El juez le dijo que también se le acusa por recibir depósitos el 13 de diciembre de 2011, por la cantidad de 445 mil pesos, el 26 de diciembre de 2012, 185 mil dólares; mientras que el 4 de julio de 2013, recibió 590 mil pesos y el 9 de junio de 2015, 624 mil pesos.
La defensa de Gilda Austin, encabezada por Javier Coello Trejo, celebró la decisión de Vázquez Rea, pero adelantó que esperan el proceso de investigación de los seis meses de la FGR para delinear la estrategia de defensa.
Coello Trejo dijo que el juez “fue muy Benigno” en dejar que la señora estuviera en su casa, al tiempo de señalar que no está de acuerdo con la acusación de la Fiscalía al acusar a Austin y Solís de formar parte de una red criminal, por lo que tienen un mes para comprobar lo contrario.
“La señora no tuvo nada que ver en esto. No estoy de acuerdo, pero respeto la decisión de juez”, dijo. Por el momento, Emilio Lozoya Austin sigue prófugo, ya que tiene órdenes de aprehensión por el caso Odebrecht.