"Yo tengo el compromiso de garantizar libertad plena a la difusión de ideas, al derecho a disentir, a la franca divulgación y transmisión de pensamiento escrito, impreso. Yo no soy un dictador. Rechazo que se me quiera ver o juzgar así. Yo no soy autoritario. Yo vengo de un movimiento opuesto al autoritarismo. Denuncié -siempre- esas expresiones contrarias la democracia..."
Vehemente el Presidente Andrés Manuel López Obrador argumentaba su respeto informadores. "Yo no tengo nada contra ninguno de los informadores que me critican. Ni ejerzo represalias; jamás las ejercí. Yo no soy como los personajes de otros regímenes. Pido que no me confundan. Pues eso sí -menguó la presión- "calienta".
López Obrador aseguró que no conoce nada relativo a una hipotética ley que "cancela todos los derechos" que pretende enviar al Congreso el Fiscal General de la República, el abogado Alejandro Gertz Manero.
El Presidente López Obrador atendió puntualmente la exigencia de la Profesora y activista Denise Dresser quien acudió a la conferencia "mañanera" para demandar justicia y respeto al Catedrático Sergio Aguayo quien vive la amenaza de ser condenado por criticar acciones del político priista Humberto Moreira.
"Se prohíbe, prohibir", sentenció López Obrador quien ofreció a la Académica Dresser que tal ley -caso de existir- no contaría con su aprobación.
Muy seria, sin aspavientos ni expresiones tremendistas la estudiosa señora Dresser consiguió cuanto se propuso.
Muy puntual -a las 7 horas- se presentó en el salón Guillermo Prieto del Palacio Nacional l Presidente Andrés Manuel López Obrador. Irradiaba buen humor. ¡Ánimo! ¡Ánimo! ¡Ánimo! -exclamó al poner píe en la plataforma que sirve a su atril.
"Vamos a decirle al pueblo cómo reflotamos a Pemex. Vamos a poner al tanto a los mexicanos de la forma en que saneamos sus finanzas. Informaremos de los trabajos que contuvieron la caída en picada de Petróleos Mexicanos. Fueron los neoliberales quienes durante 14 años se desentendieron de su responsabilidad de dotar a Pemex dineros suficientes para la exploración y explotación petrolera. Detrás de sa maniobra estaba la intención de privatizar la empresa más importante del país. Pemex con la CFE son pilares del desarrollo de México. Precursores del dizque Reforma Energética atribuyeron a esta calidad mágica. Llegarían ríos de dólares. La producción petrolera alcanzaría más de 3 millones de barriles diarios. ¡Vil engaño!"
López Obrador cedió su sitio al Ingeniero Octavio Romero. Director de Pemex, Romero dijo que la producción ronda 1, 750,000 barriles diarios. Que se privilegia a los consumidores nacionales al entregarles gasolinas logradas de petróleos ligeros.
Dio cuenta de la colocación de Bonos de Deuda de Pemex. "Se refinanciaron 5,000 millones de dólares. Buena parte de esos bonos se redimirán en ¡40 años! Los mercados del mundo los negociaron en un dos por tres.
Hombre de aire reservado más profundo conocedor de su tema, el Ingeniero Octavio Romero fijó:
"Esta operación bursátil prueba la confianza que los inversionistas del mundo tienen en México. Y n su industria petrolera.
Y terció el Presidente López Obrador:
"Embuste. Mentira. Vil engaño. Eso fue la mal llamada Reforma Energética. Procuraba liquidar a Pemex y a la Comisión Federal de Electricidad. Pugnaron privatizarlas. Que empresarios se hicieran cargo de sendos pilares del desarrollo de México. No lo consiguieron. La Comisión Federal de Electricidad provee el 54 por ciento del consumo de energía eléctrica en el país. Empresas privadas aportan el 46 restante. Así quedarán.
Tenía prisa el Presidente López Obrador. Y un desayuno de consecuencias importantes. "Hoy, más tarde me reuniré con mi gabinete ampliado. Surgirá el grupo responsable del Desarrollo, Crecimiento Económico de México. Alfonso Romo lo encabezará.
Algo de la nutrida, intensa "mañanera" de ayer.